Kobe dice adiós a la temporada

El escolta de Los Angeles  Lakers Kobe Bryant sufrió la pasada noche la peor lesión de su carrera profesional y será operado esta misma tarde por un especialista que le reconstruirá la rotura completa del tendón de Aquiles del pie izquierdo. La resonancia magnética a la que se ha sometido la estrella de los Lakers confirmó  que el jugador debía ser intervenido lo antes posible para que la rotura no le afecte más al pie izquierdo, anunció el preparador físico del equipo, Gary Vitti, tras el entrenamiento de los Lakers. Vitti ha asegurado que la baja de Kobe Bryant será de entre seis y nueve meses lo que, por supuesto, obliga al jugador a decir adiós a la temporada y que, con 34 años, se enfrenta a un incierto futuro profesional en el baloncesto de alto nivel. 

Los estudios de Hollywood difícilmente producirán películas más dramáticas y angustiosas que la que se rueda en el Staples Center de Los Ángeles. Los Lakers habían ganado a Golden State por 118-116. Dicho así, no parece gran cosa. Pero la sucesión de los acontecimientos comportó una carga emocional casi insoportable. A los Lakers les iba la vida. Utah, su rival en la lucha por entrar en los playoffs, había consumado su triunfo ante Minnesota por 107-100, mientras en el Staples todavía se disputaba el tercer cuarto.

Los Lakers no podían con el inmenso talento ofensivo desplegado por Stephen Curry. Llegaban a la recta final del partido con una desventaja muy importante: 98-107. Kobe Bryant, inasequible al desaliento, jugando todos los minutos, multiplicándose, anotando y defendiendo a Curry, acabó reventando. Después de anotar dos triples consecutivos, tras una canasta de Jack que puso el marcador en 107-109, Kobe se derrumbó literalmente al tratar de fintar a Barnes. Los árbitros pitaron falta. Kobe apenas podía caminar.

Tras el tiempo muerto, el ídolo del Staples lanzó y anotó los dos tiros libres antes de retirarse al vestuario, totalmente roto, en una escena conmovedora. “Hice un mal movimiento y escuché un chasquido. No puedo caminar”, lamentó tras el partido. A sus 34 años, Kobe ve seriamente amenazada su carrera, aunque él mismo afirmó que, de eso, ni hablar. Mike D’Antoni asumió la responsabilidad de haberle mantenido en la cancha prácticamente sin descanso ninguno durante los últimos partidos. "Es difícil digerir esto", dijo Gasol.

Cuando Kobe se retiró de la pista, quedaban tres minutos y el partido estaba empatado a 109. Las igualadas se sucedieron, a 111, a 113. Hasta que Klay Thompson anotó un triple y puso por delante a los Warriors, 115-116. Faltaba poco más de un minuto y, para colmo, acto seguido Pau Gasol perdió un balón. Para alivió de los Lakers, Thompson falló, anotó dos tiros libres Blake, y los Warriors fallaron sus dos últimos ataques.

Faltaba un segundo y medio. Le hicieron falta a Howard que, tras un buen inicio, había empezado a fallar todos los tiros libres. Anotó uno de los dos de que dispuso. Parecía todo decidido con el 118-116 que subió al marcador. Pero Curry, desde su propio campo todavía lanzó un triple postrero que escupió el aro, en medio de la terrible angustia y por fin la tensión liberada en la grada del Staples.

Kobe: "¿Por qué demonios ha pasado esto?"

Kobe Bryant escribió una emotivo texto en su Facebook, reflexionando sobre su futuro profesional y el significado de su lesión. Este es un extracto.

“Todos los entrenamientos y los sacrificios se han ido por la ventana con un paso que he dado millones de veces. La frustración es insoportable. El enfado es rabia. ¿Por qué demonios ha pasado esto? No tiene maldito sentido. ¿Y ahora se supone que tengo que volver a las pistas siendo el mismo jugador o mejor con 35 años? ¿Cómo se supone que haré eso?

No tengo ni idea. (…) Quizás así es como acaba mi libro. Quizás el padre tiempo me haya derrotado. Pero… ¡quizás no! Son las 3.30. Mi pie es como un peso muerto. Mi cabeza me da vueltas por todos los medicamentos contra el dolor y estoy totalmente despierto. (…) Algún día, empezará un nuevo viaje profesional para mí. Hoy NO es ese día (…)

Los 47 puntos y 9 triples de Curry, los 25 puntos y 7 asistencias de Klay Thompson y los 19 puntos y 8 rebotes de David Lee encontraron respuesta en el big three de los Lakers. Kobe, que no anotó en todo el primer cuarto, concluyó con 34 puntos. Pau Gasol logró un triple doble: 26 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias. Y Dwight Howard, con14 de 22 desde la línea de tiros libres, sumó 28 puntos y 7 rebotes.

La sufridísima victoria mantiene a los Lakers en la octava plaza, pero el triunfo de Utah no les da el menor resquicio y les obliga a ganar los dos partidos que les quedan, contra San Antonio y contra Houston, a menos que Utah tropiece en los dos que les falta disputar en Minnesota y en Memphis. Houston, tras perder en Memphis, también podría ver peligrar su séptima plaza. Todavía tiene que jugar contra Sacramento y Phoenix antes de rendir visita a los Lakers.

Los Jazz se medirán a Minnesota dos veces seguidas. El primer envite, en Salt Lake City, lo superaron por 107-100, gracias sobre todo a Al Jeffeson, que igualó la mejor anotación de su carrera con 40 puntos. Dos tiros libres de Barea seguidos de dos triples consecutivos de Ricky Rubio pusieron a los Wolves por delante, 97-98, cuando faltaban casi cuatro minutos para el final. Pero Jefferson anotó y dos canastas seguidas y los Wolves lo fallaron todo, excepto otra canasta de Ricky, lo cual permitió que Mo Williams sentenciase con seis puntos desde la línea de tiros libres.

Centenario feliz de Marc

Los Grizzlies persisten en su objetivo de atrapar el tercer puesto del Oeste. Vencieron por 78-82 en Houston e igualaron a victorias con Denver y también están en disposición de superar a los Clippers, su próximo rival en el FedEx Forum. Marc Gasol fue la pieza clave en la victoria frente a los Rockets. El pívot español logró otro doble doble, el número cien de su carrera, con 15 puntos y 12 rebotes, además de 5 asistencias, 3 robos de balón y 3 tapones. Un tiro libre de Marc puso por delante a los Grizzlies a falta de 1.18 minutos. Harden, el máximo anotador de los Rockets con 30 puntos, falló entonces tres tiros decisivos, uno de ellos taponado por Randolph. Conley y Prince pusieron certificaron el triunfo de su equipo desde la línea de tiros libres.

Los Thunder mantienen el liderato

Westbrook se erigió en el líder ofensivo de Oklahoma, que ganó por 90-106 en Portland y de esta forma mantiene el primer puesto de la Conferencia Oeste con una victoria más que San Antonio. Los 33 puntos del base de los Thunder contrastaron con los 10 que obtuvo el base de los Blazers, Damian Lillard. Serge Ibaka sumó 11 puntos y 6 rebotes y destacó también Reggie Jackson con 17 puntos.

Melo aventaja a Durant

Kevin Durant estuvo por debajo de sus promedios de anotación habituales, con 16 puntos. La estrella de los Thunder se complica la reválida de su título de máximo anotador de la NBA las tres últimas temporadas. Carmelo Anthony aumenta ligeramente su ventaja en la clasificación de cañoneros tras anotar 31 puntos en la victoria de los Knicks ante Cleveland por 91-101. Melo promedia 28,7 puntos y Kevin Durant, 28,3.

José Manuel Calderón continúa lesionado en el brazo derecho y no pudo jugar el partido que Detroit ganó a Charlotte por 113-93.