Las apuestas de Prandelli

“¡Necesitábamos a Mario y a Cassano!”, dijo Gigi Buffon al final del partido. Primero se fue a buscar a Pirlo, De Rossi y Barzagli. Luego abrazó a Balotelli, un abrazo de hermano mayor. Estaba feliz el capitán de la selección italiana. Como no se le veía desde el Mundial de Alemania. Desde la Eurocopa de 2008 Italia no ganaba un partido (2-0 contra Francia) en torneos internacionales y desde el Mundial de Alemania no ganaba por 2-0 con los goles de sus delanteros (en el 3-0 a Ucrania en cuartos, Luca Toni anotó un doblete).

Le costaba ganar a La Azzurra, que de Sudáfrica se marchó con dos empates y una derrota. Y le costaba marcar. Llevaba cuatro goles en los últimos siete partidos. Y contra Irlanda tuvo que sudar y mucho para marcar el segundo. “Cuando en el último saque de esquina vi que Buffon había subido a rematar creí que España y Croacia estaban empatando a uno [con ese resultado Italia tenía que ganar por 3-0]. Menos mal que no fue así”, comentó Marchisio. “He jugado uno de mis peores partidos. Pero contaba pasar a cuartos. Y ahora empieza nuestra Eurocopa”, dijo Andrea Pirlo. Fue el mensaje más repetido entre los jugadores italianos. Es como si con el gol de Balotelli se hubiesen liberado todos.

“A Cassano le vamos a esperar”, dijo Prandelli cuando el delantero fue operado de corazón

Cassano y Balotelli han sido las apuestas personales de Prandelli. Incluso por delante de un goleador nato como Di Natale (23 tantos esta temporada, 28 y 29 las dos anteriores) que, de no ser por la lesión de Giuseppe Rossi, quizás ni estaría en la Eurocopa. “A Cassano le vamos a esperar”, repetía el seleccionador un par de meses después de que operaran de corazón al jugador del Milan. Fue a verle a Milanello. Le mandó mensajes de animo día sí y otro también. A Balotelli también le esperó. Esperó sus llamadas en primavera cuando sus expulsiones en el City. Y le ha esperado en esta Eurocopa. “¿Cuánto más vamos a tener que esperar a Mario? Con tres días vale”, dijo Prandelli la semana pasada. El tercer día ‘Supermario’ lo empezó sentado en el banquillo. Pero la reacción que le pidió el técnico llegó con el gol en el minuto 90.

“El hecho de que hayan marcado Cassano y Mario no es una gratificación a mi idea de Italia. Esta noche [por ayer] estoy contento sobre todo por el grupo que tiene a gente que gana y ha ganado mucho, pero que todavía es capaz de motivarse”, dijo Prandelli.