Batalla campal en el derbi ateniense

El derbi ateniense disputado ayer entre el Panathinaikos y Olympiacos (0-1) se saldó con 50 seguidores detenidos y 20 policías detenidos tras los disturbios protagonizados por los hinchas radicales del equipo local. El duelo entre ambos conjuntos, segundo y primer clasificado de la Liga griega respectivamente, tuvo que ser interrumpido en dos ocasiones por los incidentes violentos que se desarrollaron en las gradas. Primero se retrasó 45 minutos la reanudación del encuentro por los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y, a falta de nueve minutos para el final, el duelo volvió a detenerse.

Los sucesos alcanzaron tal magnitud que fue necesaria la intervención de tres camiones de bomberos para extinguir las llamas que los aficionados del Panathinaikos habían provocado en varios sectores de las gradas. Varias bombas de gasolina explotaron cerca del terreno de juego y el colegiado del encuentro, Anastasio Kakos, se vio obligado a suspender el partido y ordenar a los futbolistas que se fueran hacia el túnel de vestuarios.

Según informó la policía, se requisaron numerosos objetos incendiarios, palos, petardos y dos cuchillos. El Panathinaikos ya ha sido castigado en una ocasión esta temporada por el comportamiento inadecuado de sus aficionados y ha tenido que jugar un partido a puerta cerrada, por lo que se espera un severo castigo después de los acontecimientos ocurridos este domingo.