Un partido contra la crisis

La semana que viene, España, la campeona del mundo, se enfrentará a Venezuela en un partido amistoso para recaudar fondos para la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE). Hay tres equipos de Segunda B (Poli Ejido, Sporting Villanueva y Sporting Mahonés) que han dejado de competir en 2012 por sus problemas económicos. El dinero ingresado por venta de entradas será destinado a paliar los efectos de la crisis financiera en el fútbol modesto: se comprarán, por ejemplo, botas para los jugadores de Segunda B y también más de 300 desfibriladores para los campos de Tercera con la ayuda de la Federación, que ha refinanciado en tres plazos de pago la deuda de casi siete millones de euros que tenía con el sindicato.

“Todo esto”, explicó sobre los esfuerzos de su asociación Luis Rubiales, el presidente de la AFE, en un desayuno informativo organizado por Europa Press, “ha significado que hayamos pasado de una afiliación de 5.900 jugadores en 2009 a los 7.500 que seremos el próximo julio, siendo el sindicato con futbolistas en activo número uno del mundo”. “Los jugadores de Segunda y Segunda B son tan campeones del mundo como los que han saboreado las mieles del triunfo, porque estos también han estado en cantera, en el fútbol humilde, y aquellos que fomentan el fútbol base tienen que tener un premio para continuar con los muchos éxitos que se están consiguiendo”, cerró el dirigente, “muy tranquilo” tras su imputación por un presunto delito societario y de apropiación indebida por el supuesto aumento de los gastos de personal en el sindicato que han denunciado seis afiliados, entre ellos Gerardo González Movilla, su predecesor en el cargo.

Nunca estuvieron tan protegidos los futbolistas profesionales como ahora, creen en la AFE, que quiere organizar una gira de amistosos con los jugadores desempleados. Mientras, la crisis ahoga a los equipos: el Poli Ejido, por ejemplo, se vendió en subasta pública, igual que un piso; nadie lo quiso, y luego, antes de desaparecer, perdió 0-14 ante el Lorca, resultado anulado por la Federación porque alineó a aficionados y juveniles ante la imposibilidad de pagar a sus futbolistas profesionales, ya libres para buscar su futuro donde puedan. Contra eso acuden al rescate España y sus profesionales.