Murray se une a los maestros

Los aficionados de tenis se frotan las manos. Después de Djokovic, invicto en 2011, se han clasificado para las semifinales de Roland Garros el 16 veces campeones de grandes Federer (ayer), el pentacampeón en la tierra roja de Paris Nadal (hoy) y, por último, tras derrotar al argentino Chela en tres sets (7-6; 7-5 y 6-2), Andy Murray. Las cuatro mejores raquetas del circuito se disputarán, pues, el Grand Slam francés.

El británico, que se medirá al mallorquín, sorteó la amenaza de Chela, único superviviente del tenis sudamericano en cuartos, tras un partido que duró casi tres horas y alcanza así su mejor registro en el grande sobre arcilla. Pese a no haber cedido ni una manga, la larga duración del encuentro delata las dificultades que Murray tuvo que aguantar para ganar. El argentino se puso 5-2 en el primer set y desaprovechó tres bolas para cerrar el parcial.

En un partido muy irregular, en el que hubo 13 roturas de servicio y muchos errores por parte de ambos, lo que tuvo Murray fue mucho más acierto en los golpes ganadores (59 por 27 del argentino). Este solo levantó bandera blanca después de la segunda manga. Cedió la tercera y el partido en apenas 35 minutos. Chela se despide con la satisfacción de igualar el mejor resultado en sus 11 Roland Garros, los cuartos de final que ya disputó en 2004, año en el que el tenis argentino fue representado por cuatro tenistas entre los mejores ocho y dos de ellos (Coria y Gaudio) pelearon por el triunfo.

Murray, que en tercera ronda se torció un tobillo ante el alemán Berrer y sufrió sobremanera ante el serbio Troicki, parece haberse recuperado por completo. Necesitará de su mejor cara para encararse a un Nadal que ante Soderling demostró haber vuelto a su mejor versión.