La paciencia de Scotti

Andrés Scotti, con 34 años y medio, es el jugador más longevo de Uruguay pero no el más veterano. Debutó con la selección con 30 años, edad a la que algunos jugadores se retiran del panorama internacional. Solo 13 futbolistas de los celestes que están en el Mundial debutaron más tarde, de los cuales cuatro se estrenaron el mismo mes que él, mayo de 2006. El charrúa más joven, Nicolás Lodeiro, debutó solo tres años después y es 14 años menor. Scotti ha sido 26 veces internacional pero todavía no ha debutado en el Mundial.

Su mejor faceta es la polivalencia; puede jugar en cualquier posición de la línea defensiva. Destaca por su tranquilidad, a veces rozando la parsimonia, cuando tiene el balón en los pies. Pasa bien en largo, lo que le permite centrar con precisión cuando se anima a subir por la banda. Pero lo que está claro es que nunca ha destacado por su precocidad. No tuvo un papel destacado hasta el año 2002, cuando militaba en el Nacional de Montevideo, su séptimo equipo. Antes había estado en clubes de segunda fila: tres uruguayos -Independiente de Flores (1993-96), Central Español (1997) y Montevideo Wonderers (dos etapas; 1997 y 2001)-, el Huachipato chileno (1998-1999) y los mexicanos Nexaca y Puebla, ambos en el año 2000. En el Nacional, uno de los equipos punteros del país y del continente, hizo una muy buena temporada. Ganaron la Liga. Scotti marcó cinco goles y fue el jugador que más partidos jugó (33) de su equipo. También participó en los 10 partidos de la Copa Libertadores, saldados con un gol. Sus números le valieron para alcanzar el Viejo Continente.

Entre 2003 y 2007, jugó en el Rubin Kazan ruso, recién ascendido a la máxima competición de ese país. "Es una liga divertida. Cuando juegas como visitante, sientes que lo haces en otro país; había viajes de nueve horas de avión", llegó a decir Scotti sobre su estancia en Rusia. Se convirtió en una pieza clave del conjunto de orillas del Volga. El primer año fue, otra vez, el jugador que más partidos jugó y le nombraron el mejor defensa extranjero de la Liga. El charrúa tuvo la oportunidad de disputar la Copa de la UEFA en 2004 y 2006, donde su equipo no pasó de la fase previa. Tras esta experiencia, volvió a Sudamérica y, antes de fichar en enero por el Colo-Colo chileno, estuvo dos años en el equipo bonaerense Argentinos Junior.

Durante la fase de clasificación, fue una pieza recurrente en los planes del seleccionador Oscar Tabárez. Jugó en ocho de los 20 partidos de la clasificación, seis de ellos de titular. En el partido de vuelta de la repesca para la clasificación del Mundial contra Costa Rica, tuvo un papel esencial. El gol uruguayo que, a la postre, clasificó al equipo, nació de un centro de Scotti desde la derecha que remató Sebastián Abreu. Desde España lo celebró Diego Scotti, el menor de la saga, que juega en el Córdoba como carrilero derecho.

Scotti no ha disputado los dos primeros partidos de Sudáfrica aunque al principio del campeonato la prensa daba por hecho su titularidad. Tabárez ha optado por Mauricio Victorino. Aún así, Scotti no tiene problemas en esperar en el banquillo hasta que su equipo le necesite. Paciencia le sobra.