Nadal agoniza, Federer se derrumba
El mallorquín logra una victoria sufrida ante Nicolás Almagro (3-6, 7-6 y 7-5) y se medirá a Robredo.- El suizo cae ante Benneteau
El coraje salvó de nuevo a Rafa Nadal. El tenista mallorquín tuvo que salvar cinco match points para seguir vivo, ganar y clasificarse para octavos de final ante un Nicolás Almagro exigente que trató de tú a tú al número dos hasta que las dolencias en el muslo le hicieron perder fuelle. Como en Indian Wells ante Nalbandián, pero contra un español y en primera ronda, en la misma jornada en la que Marat Safin colgó la raqueta.
Las cinco bolas de partido no fueron el único contratiempo de Nadal. El manacorí cometió infinidad de errores que le obligaron a levantar un partido que se prolongó hasta las tres horas y 14 minutos. Más agresivo que su rival al principio, Nadal desaprovechó las dos primeras bolas de break en el primer juego, y ya no volvió a tener una ventaja al resto hasta el cuarto juego del segundo set. Superados esos problemas iniciales, Almagro tomó las riendas del partido, y tras romper el servicio del balear (4-2) aprovechó la ventaja para llevarse el primer set.
Pese a comenzar con titubeos la segunda manga (Almagro tuvo dos bolas de break que desaprovechó) el pupilo de José Perlas no se amilanó, y no tardó en ponerse por delante de nuevo en el marcador, al romper el saque de Nadal en el tercer juego. Espabiló entonces Nadal, que replicó, empató y hasta tuvo dos bolas de set al resto, que Almagro salvó.
Con empate a cinco, Almagro y Nadal disputaron los mejores momentos del partido. El levantino ganó su servicio (6-5) y se apuntó cinco bolas de partido. Sin embargo, fiel a su estilo, Nadal fue salvándolas una a una hasta forzar la muerte súbita ante un Almagro fundido mentalmente, que cedió en el desempate (7-2)
Comenzaron los problemas. Nadal, con ampollas; Almagro, con calambres en la pierna izquierda. Pese a los dolores, ninguno claudicó. El murciano comenzó por debajo pero recuperó el break en el siguiente juego, que amplió hasta el 3-1). El siguiente juego duró más de 11 minutos, y la pérdida de su servicio fue un golpe casi mortal para Almagro, que ya no escondía los gestos de dolor. Rompió, no obstante, el saque de Rafa (5-3), pero terminó cediendo. Nadal ganaba, aunque agónicamente.
Ahora, Nadal se enfrentará en tercera ronda a Tommy Robredo, que doblegó al checo Tomas Berdych con un doble 6-4 en el que pudo ser uno de los anticipos de la próxima final de la Copa Davis (4 al 6 de diciembre en el Palau Sant Jordi de Barcelona).
Federer, noqueado en el primer asalto
Si Nadal se rehízo a base de coraje, Federer disminuyó el ritmo hasta caer derrotado en su estreno ante el francés Julián Benneteau, 49 del mundo, espoleado por la grada y renacido tras un comienzo arrollador del suizo(3-6, 7-6(4), 6-4). El 3-6 inicial no menguó las ganas de hacer algo ante su público, y Benneteau comenzó a desplegar un juego casi perfecto, apoyado en un sólido servicio y con una gran variedad de golpes que desconcertaron a un Federer, que no supo resolver la ecuación que le propuso el francés.
Cuanto más se engrandecía Benneteau más pequeño se hacía el suizo, lejos del nivel que acostumbra a la hora de cerrar partidos ante rivales menos experimentados. La duda sobre si sería capaz Benneteau de acabar con victoria planeó durante los últimos juegos, tras un gran segundo set terminado en la muerte súbita. Con un break a su favor, el francés supo administrar la ventaja hasta el 5-4. Federer lo intentó, pero no pudo doblegar la aspiración de su rival, que concluyó el partido con un saque directo que puso en pie a la grada. Entre lágrimas, incrédulo de haber completado una gesta como esa, haber derrotado al todopoderoso número uno, al que no había ganado hasta ahora ni un sólo set de las dos confrontaciones en las que se habían medido.
Benneteau se medirá en octavos de final contra su compatriota Gael Monfils, verdugo del también francés David Guez por 6-4, 7-5. No se le da bien a Federer el torneo de Bercy, el único Másters que falta en sus rebosantes vitrinas. En las siete ocasiones en las que ha jugado, no ha logrado pasar de los cuartos de final. El año pasado se marchó de forma prematura por una lesión.
Otros resultados de la jornada: Novak Djokovic a Juan Mónaco 6-3, 7-5. Robin Soderling a Ivo Karlovic 6-4, 7-6(6). Arnaud Clement a Tommy Haas 5-7, 6-3, 7-6(8). Juan Martín Del Potro a Marat Safin 6-4, 5-7, 6-4. Fernando González a John Isner 7-5, 7-6(3).
Del Potro jubila a Safin
El argentino Juan Martín del Potro derrotó en la segunda ronda de París-Bercy a Marat Safin por 6-4, 5-7, 6-4, lo que significa la retirada definitiva del ruso. Safin, que este año pone fin a su carrera profesional a los 29 años, jugó su último partido profesional y recibió el homenaje del público de Bercy, que le ha visto ganar en tres ocasiones. "Este será un momento especial de mi vida", ha afirmado en la pista el ruso, visiblemente emocionado, que recibió la ovación de la grada y el homenaje de los organizadores, quienes le otorgaron las llaves del torneo. En su adiós, Safin estuvo rodeado, además de por Del Potro, por algunos de los tenistas del circuito, como el serbio Novak Djokovic, los franceses Gilles Simon y Julien Benneteau y el español Tommy Robredo.
También le acompañaron algunos tenistas ya retirados, como el español Albert Costa, actual capitán del equipo de Copa Davis. Safin agradeció su presencia a sus ya ex colegas y deseó suerte a la "nueva generación" que viene pisando fuerte. "Ahora cierro una puerta pero espero abrir otras", afirmó el tenista, quien mostró su deseo de seguir vinculado al mundo del tenis."Muchos piensan que no he sido serio en el tenis, pero que pregunten a mis entrenadores y verán que me he sacrificado", agregó. Safin ha vivido en París algunas de sus principales gestas deportivas. "En esta ciudad empezó todo y aquí acaba. No puede haber un sitio mejor", aseguró. Con 15 Másters Series en su palmarés, además del Abierto de Estados Unidos de 2000 y el de Australia de 2005, Safin pone fin a un gran carrera, que incluye también el número uno mundial que lució unos días a finales de 2000.
Dos Copas Davis completan algunos de los principales trofeos de su palmarés. Su carrera empezó en 1998, cuando un joven moscovita de 18 años sorprendió a propios y extraños al derrotar en primera ronda de Roland Garros al brasileño Gustavo Kuerten y al estadounidense André Agassi, antes de caer frente al francés Cedric Pioline. El mundo del tenis fijó entonces su mirada en un joven espigado y fuerte que era capaz de sacar regularmente a más de 200 kilómetros por hora. Las cosas fueron tomando forma cuando en 2000 se alzó con el Abierto de Estados Unidos tras derrotar en la final a Pete Sampras. Ese año, durante el Másters de Bercy que ganó por primera vez, se hizo con el primer puesto mundial, aunque luego se lo cedería a Kuerten tras el torneo de Maestros. Ahí comenzó su primer descenso, una caída en la que comenzó a forjar su leyenda. "No quiero que el tenis me permita disfrutar de la vida", repetía el moscovita.
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