Schuster cambia el balón por la carrera continua

La política del balón en los entrenamientos del Real Madrid desde la llegada de Bernd Schuster al banquillo ha quedado apartada hoy. El técnico alemán ha preparado una sesión física de carrera para sus jugadores, en la que han corrido casi seis kilómetros. La zona media entre los hoyos 6 y 7 del campo de golf del Hotel Schloss Pichlarn ha visto correr a los jugadores del Madrid en una mañana en la que cesó la lluvia y el sol comenzó a asomar entre las nubes.

Schuster delegó en su grupo de preparados físicos y vio todo desde la distancia. Con Walter Di Salvo al mando, apuntando cada dato obtenido y transmitiéndolo al técnico germano, los jugadores se dividieron en grupos y corrieron acompañados de Jordi García y Santiago Lozano.

Realizaron cuatro series de 600 metros, otras cuatro de 400, seis de 200, para terminar alternando seis de 400 y 200. En total, cada jugador completó 5 kilómetros y 800 metros, antes de dirigirse a la zona de piscinas para culminar el entrenamiento matinal. Después de la mala imagen dejada ayer por el brasileño Emerson, en la serie de carrera continua con cambios progresivos, hoy Schuster le protegió.

Colocó al brasileño junto al italiano Fabio Cannavaro y Roberto Soldado, jugadores de diferente morfología que se basan en la explosividad y lo pasan mal en carreras largas. A los tres les daba unos metros por delante del grupo, aunque siempre acababan las series cogidos por el resto. Tres jugadores se ausentaron, los lesionados Miguel Torres, Iker Casillas y Ruud Van Nistelrooy. Ellos se desplazaron en autobús al habitual campo de entrenamiento, donde realizaron un entrenamiento de recuperación de las diferentes molestias musculares que sufren.

Por la tarde, con la novedad de Torres en el grupo, la plantilla madridista volverá a tomar contacto con balón y Schuster dejará pistas sobre el primer equipo que alineará en el estreno, el amistoso del viernes ante Stoke City de la segunda división inglesa.