Albiol lidera a su equipo ante un magnífico Inter

Los seguidores del Valencia formaron un gran mosaico al inicio del partido con un deseo para ellos: Vendetta . No en vano, en las tres últimas confrontaciones entre ambos equipos, el equipo de Mestalla nunca consiguió eliminar al rival. A diferencia de anteriores partidos, Vieri y Adriano no estaban en el campo, aunque Mancini ha contado esta noche con Crespo e Ibrahimovic.

Con los dos equipos extramotivados y jugando al cien por cien la velocidad del balón ha sido altísima en el primer tiempo. De hecho, los futbolistas apenas daban dos toques al cuero antes de entregarlo a un compañero para mantener el vertiginoso ritmo de partido. Así, a una llegada de Ibrahimovic se sucedía una doble ocasión de Villa y Morientes o un disparo lejano de Baraja.

Sin embargo, el Inter se ha ido haciendo paulatinamente con el partido gracias al buen trabajo en el centro del campo de Javier Zanetti junto a Burdisso y a sus dos puntales brasileños en las bandas: Maicon y Maxwell. Con este panorama, los delanteros del Inter buscaban la espalda de los españoles y sólo la concentración y velocidad de Ayala y Albiol han impedido buenas opciones para Ibrahimovic y Crespo.

Ninguno retrocede

Con las pulsaciones tan altas entre los presentes se han sucedido los rifirafes y la tensión se ha elevado hasta que Albiol ha sufrido una dura entrada de Ibrahimovic que Cañizares ha salido a protestar hasta fuera del área. Una vez solucionado el tumultuoso incidente, la tendencia al correcalles se ha mantenido, pero la mejor opción ha sido para el Inter, aunque el tiro de Crespo a bocajarro se tropezó en la mano de Albiol dentro del área sin que el árbitro considerara que hubo voluntariedad.

Además, el Valencia perdía a Baraja pasada la primera media hora al lesionarse intentando cortar un contragolpe comandado por Dacourt. Hugo Viana entraba en su lugar y Silva se encontraba sin apenas opciones de mostrar su calidad porque en las escasas oportunidades en que el balón llegaba a la banda izquierda se encontraba con la dureza neoazurra .

Mientras la dupla de delanteros del Inter acechaba cualquier fallo del club español, el Valencia ha tuteado al líder de la liga italiana, sin perder la intención de marcar un gol y a punto ha estado de lograrlo Morientes al cabecear un gran centro de Villa, poco después de que Stankovic remata al lateral de la red un buen centro de Maicon. Faltaban 30 minutos para el final y cualquiera de los dos equipos podía adelantarse en el marcador. El primero en mover ficha ha sido Mancini al dar entrada a Julio Cruz en lugar de su compatriota Crespo.

Cambio de posiciones

Ante la perspectiva de un acoso italiano en los últimos minutos Quique Flores ha incorporado a Vicente en lugar de Morientes, mientras que Mancini buscaba más gol con la sustitución de Dacourt por Figo.

El nuevo sistema ha permitido al Valencia aprovecharse de las prisas de los visitantes para acercarse al área con más facilidad, pero Materazzi ponía el suspense al cabecear una falta ejecutada por Figo que Marchena cortaba bajo palos. Apenas un minuto después Raúl Albiol tenía que exprimir al máximo su velocidad cuando Julio Cruz se marchaba solo hacia el área tras un gran pase de Materazzi. De este modo, los aficionados de Mestalla asistían a un partido desarrollado con mucho corazón y cabeza por parte de todos los jugadores. De hecho, la sensación de los últimos minutos prolongaba la sensación de que cualquier fallo sería aprovechado por el rival. Afortunadamente para el Valencia, sus futbolistas han estado sobresalientes en esta faceta -especialmente Albiol- en todo el partido y más aún en los últimos minutos con un Inter volcado al ataque.

Pero el espíritu de los de Quique Flores es valiente y ellos han sido los que han tenido las últimas opciones para marcar y sólo el cansancio de Villa y un poco más de puntería de Marchena (tiró al palo en el descuento) podrían haber sentenciado su grandioso partido.

Triste final

Desgraciadamente, al final del partido se han sucedido los enfrentamientos y numerosos jugadores e integrantes de ambos equipos se han peleado entre sí. Incluso la policía ha tenido que entrar en los vestuarios para evitar que se sucedieran los golpes. Tras una batalla campal con Burdisso y David Navarro, Francesco Toldo ha entrado en el vestuario valencianista y otros jugadores como Figo o Cambiasso han trataron de seguirle mientras las fuerzas de seguridad los han frenado. Triste final aunque el Valencia está clasificado.

Valencia-Inter termina a puñetazos