El marroquí Gharib gana el oro en la prueba de maratón

El marroquí Jaouad Gharib ha revalidado el título mundial de maratón al alzarse con la medalla de oro de los Mundiales de Atletismo que se están disputando en Helsinki, con un tiempo de 2:10:10. En segundo lugar ha entrado el tanzano Christopher Isegwe. La medalla de bronce ha sido para el japonés Ogata. El primer español en entrar en la meta ha sido el toledano Julio Rey, en octava posición.

El atleta español, que obtuvo la plata en los Mundiales de París 2003, ha llegado incluso a liderar la carrera, en el paso por el kilómetro diez. Sin embargo, a quince kilómetros de que terminara la prueba, no ha podido aguantar el tirón dado por el marroquí y ha quedado descolgado, sin opciones de conseguir medalla.

Del resto de los españoles, sólo ha terminado la carrera el madrileño Chema Martínez, que ha entrado al estadio olímpico de Helsinki en el trigésimo puesto con un tiempo de 2:20.07, mientras que el catalán José Rios, que fue duda hasta última hora por una contractura en los isquiotibiales, y Kamel Ziani han abandonado.

La humedad, enemigo de los españoles

Tanto Julio Rey como Chema Martínez han achacado a la alta humedad su bajo rendimiento. El toledano ha explicado que cuando el marroquí Jaouad Gharib lanzó el ataque definitivo respondió pero que vio "que no iba". "Por más que bebía tenía sed, sed y sed, pero las piernas no me iban. He sufrido, pero he conseguido al final ser octavo, aunque no he sabido el puesto en el que iba hasta que no he visto el panel", ha explicado. Tampoco ha escondido su decepción y ha dicho que abandona Helsinki "triste porque no he sido medalla pero de otra manera diferente a Atenas, pensando que he dado todo lo que llevaba dentro".

"No hay que buscarle tres pies al gato. Sudaba mucho, por más que bebía no recuperaba, no podía, me he deshidratado. En cuanto he bebido un poco me he recuperado. El tema era de líquidos", ha declarado. "Lo que me ha afectado es la humedad. En Toledo hay calor seco... a lo mejor tenía que haber ido a un sitio de costa, con más humedad", ha reconocido. Rey ha añadido que "quizá los africanos están más acostumbrados a la humedad" y que él no cambiará su forma de correr, aunque ha reconocido que a veces le "puede más el corazón que con la cabeza".

Chema Martínez, por su lado, ha explicado que desde el kilómetro 15 estaba totalmente "deshidratado", algo que no le había pasado nunca antes. "El circuito era durísimo, con continuos toboganes y hasta el kilómetro 42 he sufrido como un perro. He bebido todo lo que he podido. He terminado para la clasificación por equipos", ha indicado. Martínez ha explicado que, cuando iba sin problemas en el grupo de cabeza, sin haber hecho gasto alguno, sintió que no iba por la deshidratación, que le bloquearon las piernas.