Un reparto justo de puntos

Levante y Getafe protagonizaron un encuentro con poco fútbol y lo mejor que se puede decir de ellos es que sumaron un punto más, que le sirve a los valencianos para romper una racha de derrotas y al Getafe para vivir una semana más fuera de los puestos de descenso.

La lluvia deslució un partido jugado con intensidad, pero sin demasiada brillantez. El Levante llevó la iniciativa pero sin encontrar el camino del gol. El Getafe puso toda su dedicación en defender las acometidas de los locales y no se animó a irse al ataque tanto como en es habitual en el equipo de Quique Flores. Pese a todo contó con la mejor ocasión de la primera parte, en un remate de cabeza de Yordi, pareja de Pachón en ataque, que se estrelló en el poste. Por el Levante fue Sergio García quien más activo estuvo en ataque, lo que no es decir mucho en un conjunto que no tiró entre los tres palos de la portería que defiende Sánchez Broto.

Poco fútbol y agresióp al árbitro

La pobre imagen ofrecida en la primera parte apenas mejoró en la segunda y el fútbol fue perdiendo protagonismo en favor de factores externos. Sánchez Broto fue golpeado por una botella lanzada desde la grada y poco después se le anuló un gol al argentino Reggi, que remató con la mano. La celebración de los jugadores del Levante fue lo más destacado que se vio en los segundos 45 minutos. El Getafe apenas arriesgó y se conformó con sumar un nuevo punto, el segundo consecutivo logrado lejos del Coliseum.