Arrebatados por los libros
Constatamos al entrar en Arrebato Libros, la librería de Pepe Olona, que los libros, como la cámara autónoma de Zulueta, todo se lo tragan
Arrebato es la película que en el año 1979 estrenó Iván Zulueta. Un film oscuro y tenebroso que mostraba la verdadera magnitud de los siniestro a través de una cámara de vídeo que todo lo fagocitaba, como un vampiro conectado por cable. No sabemos si Pepe Olona, propietario de Arrebato Libros, tuvo en cuenta este extraño film para nombrar a su proyecto cultural. Lo que sí constatamos al entrar en su librería es que los libros, como aquella cámara autónoma de Zulueta, todo se lo tragan. Arrebato nació en el año 1999 como fanzine. Cinco años después se trasladaron a Madrid, a Malasaña, para constituir no sólo la librería sino también una editorial y un sólido proyecto de gestión y dinamización cultural del barrio.
La consecución del actual local tiene como génesis una historia que bien podría convertirse en ficción: “Todo fue un conjunto de casualidades y suertes. A principios de 2000 estuve mirando locales en un barrio de Malasaña que era muy distinto al actual, tan de moda”, explica Olona. Sin embargo, una trama casi de novela negra propició su aterrizaje definitivo en la calle La Palma, número 21: “A raíz de una persecución de policías con camellos, hachís y demás se quedó un local libre, ya que el que lo regentaba se asustó”. Por si todo esto no fuera suficiente, una catástrofe medioambiental hizo el resto: “Al día siguiente llovió a mares y la persona que iba a quedarse con el local, no pudo cogerlo. Al día siguiente, fui yo y me lo quedé”, concluye Olona. Visto el periplo repleto de aventuras y desgracias de todo tipo, fue un milagro que el proyecto tuviera un final feliz: “En realidad si todo eso no hubiera sucedido, yo no sé donde estaríamos”, remata el propietario.
Arrebato Libros, una librería 'mundialmente pequeña' -según reza su lema-, se ha convertido en lugar de encuentro para letraheridos malasañeros. Este local está enfocado en dos tipos de libros esencialmente: los especializados y de editoriales independientes y los de segunda mano. Entre los primeros, Olona señala que habla de independientes en el sentido de “no trabajar con distribuidoras y prestando especial atención a autores poco habituales”. Entre los segundos, Olona cuenta con un fondo de unos 12.000 ejemplares. Los libros raros, agotados, de coleccionista o de segunda mano provocan, según el propietario, todo tipo de situaciones curiosas entre quienes los compran y los venden. Hay auténticos bibliófilos entre su público habitual. Son libros de todas las temáticas y todas las épocas. En este sentido, “la clientela es como nuestros libros, completamente diferenciada”, explica Olona.
En la página web de Arrebato consta una cita sin autor que cualquiera que haya visitado el local suscribiría: “Hay cosas que son difíciles de definir en esencia. Sobre todo si Arrebato no es del todo una librería, como no es exactamente una editorial, como no es con exactitud un núcleo de gestión cultural, sino que es todo a la vez". Y es que en Arrebato no saben permanecer quietos. Entre las actividades más destacadas se encuentra el Festival Poetas, organizado junto a El Matadero y la Feria del Libro de Madrid: “Antes se había llamado Poetas por km2. Se trata de un festival poético en el que tratamos de reunir a artistas con propuestas humorísticas, musicales, fotográficas, etc... que trabajen el concepto de lo poético contemporáneo”, afirma Olona, cuyo objetivo es además mostrar la palabra del mundo poético a esa inmensa minoría que tanto cuidan. En este sentido, han traído a gente de Europa, Latinoamérica y España. Además, el festival cuenta con una edición en Latinoamérica y ya se ha celebrado en sedes como Brasil, México o Puerto Rico.
Resulta sencillo adivinar entonces por qué tipo de libros apuestan como editorial: “Queremos a autores que salgan del libro, es decir, que además del libro tengan parte escénica”. En su nómina de escritores-poetas-actores constan la micropoetisa Ajo, Javier Corcobado o Javier Gallego 'Crudo', entre otros. Sin duda el mayor éxito de la editorial lo ostenta la primera autora. Sus primeros libros han ido editándose a razón de mil ejemplares cada año desde 2005. Hagan cuentas. Otro de los logros recientes es Vamos a follar hasta que nos enamoremos, de Ana Elena Pena - “una auto edición que resume nuestra forma de trabajar ya que que lo editamos y distribuimos directamente nosotros”- o El grito en el cielo, el nuevo libro de poemas de Javier Gallego que se presentó el pasado 14 de diciembre en el Teatro del Barrio junto a Nacho Vegas, Los Volumen y Mcnulty Posproducción.
Pepe Olona, el librero que cambió su forma de ver el mundo tras la lectura de Hojas de hierba de Walt Whitman y la obra completa de Shakespeare, no está seguro que si hay que creer o no en los libros. “Lo que sí sé es que es una forma de vida”, asegura, “de la mía por lo menos, que no me la imagino sin ellos, sin los libros”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.