La televisión se vuelve bicéfala

Se miran de reojo, vigilan los movimientos de la parrilla, crean programas clónicos. Las televisiones utilizan todos los métodos a su alcance para ganar audiencia y evitar que los competidores logren ventajas que sean difíciles de enjugar. Este marcaje en corto ha tenido como resultado un empate entre las dos principales cadenas. Telecinco y Antena 3 se han apuntado cada una el 13,1% de la cuota de pantalla en marzo, un mes el que el consumo alcanzó 262 minutos por persona y día.

Este coliderazgo pone de manifiesto que en España la televisión es cosa de dos. Tan igualadas están las fuerzas que incluso los canales satélites de los dos grandes grupos audiovisuales (Mediaset y Atresmedia) también empatan. Cuatro y La Sexta cerraron el mes con el 5,9%.

Telecinco obtiene sus mejores resultados con el fútbol (el Francia-España clasificatorio para el Mundial de Brasil de 2014 superó los 10,5 millones de aficionados), aunque su público más fiel son las mujeres y los mayores de 55 años. En Antena 3 ha ganado el concurso de saltos de trampolín Splash! Famosos al agua (4,4 millones). Esta cadena triunfa entre los hombres y los espectadores con edades comprendidas entre los 13 y los 54 años, según el informe elaborado por Barlovento Comunicación sobre datos de Kantar Media.

Para TVE, marzo ha sido un mes sin alteraciones. Con el 10,2% repite el resultado de febrero, que le dio su mínimo histórico. Su mejor dato viene también de la mano del fútbol. El Manchester United-Real Madrid le reportó 9,7 millones de espectadores y con el Barcelona-Milan reclutó 8,8 millones. Estas marcas contribuyeron a aupar la audiencia de los telediarios, que recuperaron la primera posición en el acumulado de las ediciones de sobremesa y noche. Las jornadas de Champions hicieron subir como la espuma el TD-2, llegando a superar los ocho millones de seguidores.

Gracias, en parte, a estos resultados, los telediarios de TVE vuelven a ser los más vistos en el cómputo global, con una media de 2.168.000 espectadores (13,5% de cuota), seguidos de los de Telecinco (2.028.000 y 13,3%) y los de Antena 3 (1.989.000 y 13,2%). Pero si se miden individualmente, Telecinco se impone en la edición diaria (de lunes a viernes) de las 21.00 mientras que Antena 3 gana en la sobremesa del fin de semana.

Uno de los programas informativos de TVE que se ha resentido de forma particular durante los últimos meses es Informe semanal, que en poco más de un año ha perdido casi la mitad de la audiencia. A principios del año pasado superaba los dos millones de telespectadores, y el pasado sábado, justo cuando emitía un especial sobre el 40º aniversario del programa pionero, registraba 1.126.000 (7,5%).

En muchas comunidades, los noticieros más vistos son los que emiten sus respectivos canales, aunque las televisiones autonómicas de carácter público siguen en retroceso. En conjunto, estas emisoras registran una cuota de pantalla del 8,7%, su mínimo mensual. Por encima de la media se sitúan la televisión catalana, la aragonesa, la andaluza, la vasca y la gallega. Y muy por debajo de esa barrera aparecen la valenciana y la madrileña, que se mueven entre el 5,1% y el 4%.

Entre los canales temáticos que se emiten en abierto el más seguido es FDF, especializado en series (se impone con claridad La que se avecina) y Clan, dedicado al público infantil (domina con contundencia Bob Esponja), que obtienen el 2,8% y el 2,4%, respectivamente. Y en la particular batalla que libran 13 TV e Intereconomía gana la primera con resolución (1,5% frente al 0,9%). Por debajo del 1% están también los canales públicos Teledeporte y 24 Horas.

Durante el mes de marzo, los españoles han estado 4 horas y 22 minutos al día frente a la pantalla. Los más teleadictos son los andaluces (290 minutos) y los castellano-manchegos (280) y los que menos interés demuestran por el medio son los gallegos (239 minutos) y los canarios (243). Ha sido, además, el mes de marzo de mayor consumo de toda la historia (nueve minutos más que hace un año), aunque son 10 minutos menos que en febrero. La llegada del buen tiempo está detrás, en buena medida, de esta tendencia a la baja.