El sistema electoral alemán “no influye en la distribución de poder”, dice un experto

El politólogo Dieter Nohlen, profesor emérito de Ciencia Política de la universidad de Heidelberg, ha defendido que el modelo alemán no altera la proporcionalidad respecto al sistema vigente, aunque ha advertido que deben establecerse los cortafuegos necesarios para evitar que la elección por distritos pueda derivar en un modelo marcado por el caciquismo. Así lo ha expresado en la comisión de estudio por la posible reforma de la ley electoral de la Comunidad de Madrid, donde ha comparecido a petición del PP. El Partido Popular es partidario de aplicar el sistema alemán, permitiendo la elección de un tercio de los diputados regionales —en la actualidad son 129 (72 del PP, 36 del PSOE, 13 de IU y ocho de UPyD)— mediante 43 circunscripciones. El resto de señorías se elegirían con el sistema tradicional de listas cerradas aplicando la Ley D’Hont.

“En el caso madrileño no se perdería el grado de proporcionalidad del sistema vigente. La reforma propuesta es neutral”, esgrimió Nohlen, para quien las circunscripciones tienen la virtud de “personalizar” la política: “Mejora el contacto entre representantes y representados, enriquece la vida política porque además anima la competencia”.

El experto rechazó que el PP “busque un interés” con el sistema alemán. “El partido contrario a la reforma suele ser el beneficiado”, enfatizó, destcando además que con las circunscripciones mejora la calidad interna de los partidos. Para ello puso como ejemplo el control que existe en Alemania sobre la financiación de los partidos, en particular de los diputados elegidos por distritos: “El candidato por una circunscripción tiene que corresponder a unas reglas de financiación muy precisas que, de no cumplirse, le penalizan con la pérdida del cargo”. De lo que no se mostró partidario fue de las listas desbloqueadas. “Se cree que están pensadas para que haya una capacidad enorme de representación, pero no es así”, afirmó.

La socialista Maru Menéndez ha valorado que Nohlen haya advertido “de los riesgos de la uninominalidad vinculados al caciquismo local”. “Hay que tener cuidado con los efectos indeseados. En esta comunidad tenemos un contexto que da a pensar en esos efectos colaterales”, ha expresado Menéndez en alusión al “neocaciquismo”. El Partido Socialista de Madrid ha defendido bajar la barrera de representación de los grupos en la Asamblea del 5 al 3%, así como las listas cremalleras. “No hay mejor fortalecimiento de los vínculos con los ciudadanos que la ejemplaridad y transparencia”, ha concluido. Al revés de lo que piensa el PSM, la cúpula del PSOE ha dejado claro en su reciente Conferencia Política que le gusta el modelo alemán, aunque la cúpula de Ferraz no se atrevió a plantear una reforma electoral.

Por parte de Izquierda Unida, Eulalia Vaquero ha mostrado su oposición al modelo alemán, al “cuestionar la neutralidad” de la propuesta del PP y entender que las circunscripciones “restarían proporcionalidad” y mermaría el “control” de los políticos. “Madrid es una comunidad uniprovincial con circunscripción única, la ley electoral satisface los intereses de los partidos políticos y de la ciudadanía. Ha dado estabilidad a los gobiernos”, ha sentenciado. IU es partidaria de rebajar del 5 al 3% el mínimo exigido para que un partido tenga representación en la Asamblea de Madrid. “El 5% está bien, bajar la barrera abre la fragmentación”, ha opinado el politólogo teutón.

El portavoz de UPyD, Luis de Velasco, ha señalado que “las dobles listas crearía diputados de primera, en las que el más conocido sería el localista, y de segunda categoría”. “En Alemania no pasa eso; al contrario, los diputados de los partidos minoritarios salen reforzados”, ha replicado Nohlen. Velasco ha advertido del “peligro” del diseño de las circunscripciones “en beneficio del poder”, una tentación que ya aplicó por primera vez Elbridge Manger en Estados Unidos en el siglo XIX. De entonces data la expresión gerrymandering como definición de la manipulación del diseño de las circunscripciones electoral a gusto del partido que gobierna.

La formación magenta se ha mostrado contraria “a la compatibilidad entre alcaldes y diputados”, ya que a su entender “el regidor partiría de una ventaja”. UPyD es partidaria de reducir los escaños del Parlamento autonómico a la mitad: “129 diputados son excesivos por razones de coste y de conocimiento. Todo el estado de las autonomías nos parece excesivo”. También es favorable a las listas desbloqueadas, y que se reduzca el mínimo de entrada a la Asamblea del 5 al 3%, “pues favorece la libertad de elección”.

“Planteamos este modelo por primera vez en 2011, tras el mayor éxito electoral del PP en la región y después de ganar cinco elecciones consecutivas. No pretendemos arrimar el ascua a la sardina, y blindarnos con este sistema”, ha defendido el portavoz del PP, Íñigo Henríquez de Luna. “Si algo es el sistema alemán, es proporcional. Ni siquiera es un sistema mixto”, ha insistido el representante del Partido Popular, que está “abierto al diseño de las circunscripciones con todos los partidos”. Frente a la división de los diputados por categorías que teme la oposición, ha señalado que no considera que “el poder de un diputado por un distrito sea un peligro”.