Suso Seixo, reelegido por cuarta vez secretario general de la CIG

El VI congreso de la Confederación Intersindical Galega (CIG), celebrado durante el fin de semana en Santiago, aprobó algunas novedades organizativas, como la creación de una rama juvenil, con el propósito de integrar más a parados, jóvenes y pensionistas. Pero en lo que respecta a las caras de los que dirigen el sindicato el continuismo es total. Suso Seixo revalidó su cuarto mandato como secretario general de la central nacionalista, al frente de una dirección que pretende englobar las “distintas sensibilidades” y en la que solo hay dos caras nuevas. La apuesta contó con un fuerte respaldo de la militancia: el 90,2 % de los delegados dio su apoyo a la candidatura encabezada por Seixo, según informa Europa Press.

 El reelegido secretario general recibió 499 votos a favor frente a 50 en blanco y cuatro nulos. En la ejecutiva del sindicato mantienen su puesto dirigentes de larga trayectoria como Paulo Carril, Ramiro Oubiña, Antolín Alcántara o Manuel Currás.

La intervención de Seixo en el acto de clausura del congreso fue una llamada a la movilización social para frenar las políticas contrarias a los intereses de los trabajadores. En ese aspecto, la CIG promete estar en primera línea, ya que, según Seixo, la batalla no se ganará con “movimientos espontáneos” sino que se necesita una respuesta “ágil y organizada” ya que enfrente hay una estrategia “perfectamente dirigida desde instituciones con mucho poder”.

“Sabemos que lo que tenemos por delante es una situación difícil, en la medida en que las políticas que promueven el Gobierno y la Unión Europea no se van a modificar”, señaló Seixo, quien dejó un mensaje pesimista ante el panorama que intuye para los próximos meses: “Todo lo que tiene que ver con recortes de derechos básicos, como las pensiones, los servicios públicos o en inversión pública, empeorará”. La receta de la CIG para hacer frente a esa situación es “crear mucha organización y estar preparados” con el propósito de “cambiar la correlación de fuerzas” y demostrar que “hay alternativas” a la política promovida por el “capital financiero”.

Al congreso de la CIG fueron invitadas todas las organizaciones nacionalistas: BNG, Anova, Compromiso por Galicia y Nós-Unidade Popular.