De plaza de toros a plaza multiusos

Los tiempos obligan a obtener ingresos hasta debajo de las piedras. También del albero más legendario, la última frontera por explorar de los organizadores de eventos. El hambre agudiza el ingenio, y por eso Las Ventas, sin uso conocido en otoño e invierno, pasará a ser un espacio multiusos todo el año. Contará para ello con una cúpula de quita y pon de 160 toneladas, 102 metros de diámetro y una altura máxima de 75 metros que la cubrirá a mediados de diciembre. Para levantarla se necesitarán 15 días, y otros ocho para desmontarla.

Los cuatro millones de euros que cuesta la estructura los pondrá Warner Music, que a cambio se garantiza durante tres años la exclusividad para organizar actos de todo tipo (deportivos, musicales, ferias, desfiles de moda, etcétera), salvo aquellos relacionados con el mundo de los toros o las macrofiestas, tabú tras la tragedia del Madrid Arena.

“Las comparaciones son odiosas, aquí lo fundamental es que, si pasa algo, se cumpla con el plan de seguridad. En todo caso, en Nochevieja no habrá fiestas así. Animo a los madrileños a que el 31 de diciembre y el 1 de enero vengan al Circo Mundial”, zanja el presidente regional Ignacio González, que destaca que la obra “permitirá unos usos, y por tanto unos ingresos, alternativos a los de la temporada taurina”. “De esta manera, le ganamos más utilidad a Las Ventas”, apostilla. Otro ejemplo: la cubierta permitiría que la plaza de toros albergase los partidos de baloncesto de Madrid 2020. Una alternativa al plan original, que pretendía darle ese uso a un pabellón que el Real Madrid tenía planeado construir en la ciudad deportiva de Valdebebas y que no hará.

A la espera de conocer en septiembre de 2013 la sede olímpica elegida para 2020, el gerente de Taurodelta, José Luis Blanco, señala que ya hay 29 espectáculos no taurinos previstos para 2013, “el 50% en otoño-invierno”. “La carpa se inaugurará este año a mediados de diciembre, pero en 2013 lo adelantaremos a octubre”, añade.

El Circo Mundial será quien estrene la cubierta, que ayer empezó a montar un hormiguero de operarios. Un mecano gigantesco formado por vigas dobles y otras docenas de aparejos de aluminio que se apoyarán en bloques de hormigón y en una corona circular central de acero. El responsable del Ejecutivo autonómico destaca que la cubierta “no afectará a la estructura” de Las Ventas, “algo que no habría permitido la dirección general de Patrimonio”. Tampoco a la “imagen del monumento”, ya que no será visible desde el exterior. “Que no sobresalga contribuirá a que la cubierta esté más guarecida del viento y tenga que soportar menos tensión”, observa González.

Eso sí, Las Ventas perderá aforo con la cubierta en uso, ya que tapará los palcos y las andanadas. “De los 18.500 asientos que tiene, se quedarán en 16.000, aunque en el albero cabrían 1.800 personas en los conciertos”, según Blanco.

La estructura estará cubierta por tres capas de lonas de PVC: las dos superiores formarán una cámara de aire que servirá como aislamiento de apoyo a la instalación de climatización. La inferior estará microperforada y servirá como complemento a la decoración final. Además, se instalará un sistema independiente de recogida de agua de lluvia, canalizándola al general de la plaza, así como un sistema de climatización autónoma. “Estamos ante una obra de vanguardia y diseño de la ingeniería española”, piropea el mandatario madrileño.

Pese a los parabienes y bondades que la conceden, la cúpula se desmontará y guardará en un almacén durante la temporada taurina, su época de gloria tradicional, entre marzo y septiembre. Las Ventas conservará su estampa original en ese periodo. De hecho, la cúpula deberá estar retirada el 24 de marzo para celebrar el primer festejo taurino del curso: la corrida del domingo de Ramos. “Una cubierta desmontable es la mejor solución a quienes ven en este espacio más posibilidades que las de únicamente un recinto taurino, respetando al mismo tiempo a todos aquellos madrileños que no desean que Las Ventas pierda su esencia como joya de la fiesta nacional”, manifiesta el consejero de Presidencia y Justicia y responsable de asuntos taurinos, Salvador Victoria.

La organización de eventos no alterará el trascurso habitual de la temporada taurina (70 corridas previstas en 2013). Las Ventas no se celebrará ninguna otra actividad distinta a la de la tauromaquia entre julio y septiembre. Llueva o sople el viento.