Bankia y el Valencia

El agujero negro de Bankia y su posterior rescate por el Estado ha alarmado al Valencia C F. La incertidumbre se cierne sobre el acuerdo que alcanzó el club que preside Manuel Llorente con la entidad financiera, ya que sobre Mestalla pesa una hipoteca de 225 millones de euros.Bankia tiene pactado con el Valencia hacerse cargo de las parcelas del viejo Mestalla y de los terrenos de la ciudad deportiva de Paterna. El montante de la operación supone 250 millones de euros para el club.

Con esta operación, la entidad rebajaría su deuda hasta los 180 millones, lejos de los 550 millones que tres años atrás acumuló por los sueños de grandeza del expresidente Juan Soler y la infructuosa gestión de su sucesor, Vicente Soriano, ambos dedicados al negocio inmobiliario.

En el acuerdo con Bankia también se estableció que la entidad bancaria concedería un préstamo de 150 millones para terminar el nuevo Mestalla, cuyas obras están paralizadas desde hace 40 meses tras haber invertido otros 150.

Bankia también concedería un préstamo de 150 millones para terminar el nuevo Mestalla

Mientras se cerraba la operación urbanística que debía desbloquear la situación, el club refinanció la deuda de 225 millones, por la que pagaba unos 15 millones anuales en concepto de intereses desde hace tres temporadas.

Pero la intervención y las necesidades de capital descubiertas en Bankia han convertido aquel pacto en una quimera. El pasado martes, Manuel Llorente se desplazó a Madrid para intentar un nuevo aplazamiento del pago de la deuda, que expira el próximo 26 de junio.

Al parecer, Llorente pactó una ampliación del plazo de devolución del préstamo de seis meses. Con ello el Valencia ganaría tiempo hasta que se despejara la situación del banco para poder hacer efectiva la compra de Mestalla y los terrenos de Paterna.

Los problemas económicos del Valencia también se extienden a su Fundación, poseedora de 75 millones de euros en acciones, que pidió prestados a Bancaja hace tres años con el aval de la Generalitat.

En los próximos tres meses, la Fundación Valencia C F tiene que atender el pago de una cantidad cercana a los seis millones de euros en concepto de intereses sin amortización de deuda, lo que ha obligado a la entidad sin ánimo de lucro a sacar a la venta 2,5 millones de euros en acciones, en todo caso insuficientes para saldar el pago.