El festival Costa de Fuego exige apoyo a la Administración

La empresa organizadora del Festival Internacional de Benicàssim (FIB), Maraworld, presentó el jueves en Benicàssim su apuesta por una nueva cita musical, en esta ocasión dedicada al rock duro, metal y hardcore que, con el nombre de Costa de Fuego, traerá al municipio grupos como Guns’n’Roses, Marlyn Manson, Barón Rojo, Obús y Hamlet. El nuevo evento, que se celebrará el 20 y 21 de julio, espera rebasar los 20.000 visitantes y tener un impacto económico directo de entre cuatro y cinco millones. Esta nueva apuesta llevó a los representantes de Maraworld a reclamar mayor compromiso de las Administraciones ante problemas de los que vienen advirtiendo desde hace años: una alternativa al puente que cruza la N-340 y, sobre todo, una solución para los terrenos donde se organizarán los dos festivales.

“Estamos apostando por la internacionalización de la marca Benicàssim, pero estamos preocupados por la austeridad asociada en tiempos de crisis”, dijo José Corral, director ejecutivo de la empresa, durante la presentación del nuevo festival en el hotel Voramar de Benicàssim. Corral hizo públicamente una “llamada a la colaboración” de las Administraciones y sectores como los hosteleros para la pervivencia de los festivales. Entre el FIB y el Costa de Fuego se espera una repercusión de hasta 23 millones.

Según explicó, se necesitarán entre tres y cinco años para que el Costa de Fuego se establezca en el municipio. “Es el momento de acabar con los intereses particulares y disputas políticas, es el momento de comprometerse”, dijo. Corral habló de la “inestabilidad” de los terrenos (son fincas privadas y cada año se debe negociar con los dueños) y del “problema de seguridad pública” del puente que llevan años tratando de solucionar.

La alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués, anunció que ya se está elaborando un estudio junto con la Diputación para “valorar y cuantificar los terrenos y ver de qué forma, con el plan estratégico del suelo, podemos acceder a la titularidad”. Este año, el Consistorio ha tenido que negociar duramente con los propietarios, que exigían un mayor precio para el alquiler de los solares. Las reivindicaciones de los organizadores del FIB y del Costa de Fuego llegan además en pleno proceso de desaparición de la Fundación de Festivales Costa Azahar, considerada “fundamental” para la pervivencia de estos eventos musicales.