El Banco de la República sube la tasa de interés al 12%

El Banco Central de Colombia sube de 11% a 12% sus tasas de interés, según anunció este viernes el gerente del Banco, Leonardo Villar. Esta tasa es con la que el Banco les presta dinero a otras entidades financieras y, por lo tanto, impacta el costo de endeudarse en Colombia.

La junta directiva del Banco de la República cumplió con las expectativas de la mayoría de analistas, que esperaban que mantuviera la velocidad de aumento de 100 puntos básicos que ha mantenido desde la reunión de agosto. Sin embargo, dos de los siete miembros votaron de forma divergente: uno por incrementar más la tasa, el 1.25% y otro por hacerlo mucho menos, el 0.25%. Esa dispersión de la votación muestra que las previsiones no están enteramente alineadas entre sí. Y contrasta con la decisión anterior reciente, a fines de octubre, que se dio por unanimidad.

El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, estuvo presente en el anuncio, realizado ante los medios de comunicación y los analistas financieros. En septiembre había tenido el único voto divergente, en contra de aumentar 100 puntos básicos como definieron todos sus colegas en la junta, pero en octubre se alineó con ellos.

Villar aseguró que tomaron la decisión basados en los más recientes datos de inflación, que muestran que hasta noviembre el costo de vida en el país ha aumentado un 12,53%. Es una cifra más de cuatro veces mayor a la que –para los expertos de la entidad– es buena para la economía, y es la meta de inflación hacia la que apuntan sus decisiones de tasa de interés: 3%. De hecho, en su comunicado la junta explica que entre los motivos para aumentar la tasa está que la inflación de noviembre fue “superior a la esperada” y que “las expectativas de inflación continúan por encima de la meta a todos los horizontes”.

El ministro Ocampo aclaró, en la rueda de prensa posterior al anuncio, que la decisión se sustenta en la preocupación por la inflación. “Por el otro lado está el tema de la desaceleración del crecimiento económico”, explicó. Pero, en sus palabras, “la inflación predominó”. Más adelante explicó que “mientras la inflación no comience a bajar, será imposible bajar las tasas de interés” y recordó que a pesar de que la votación no fue unánime, ninguno de los miembros de la junta directiva votó por reducir o mantener las tasas.

De hecho, el tamaño del alza refleja también esa preocupación por la inflación. En países en los que ésta ha empezado a ceder, los bancos centrales han reducido el ritmo del alza, como ha pasado en Estados Unidos o México. Además, el gerente Villar explicó que sienten tranquilidad de que hay margen para subir las tasas, pues la economía crece este año muy rápido: el Banco calcula que el PIB aumentará un 8%. “Las proyecciones que ha hecho el equipo técnico del Banco y que están implícitas en las decisiones adoptadas muestran una economía que este año posiblemente va a tener el mayor crecimiento del mundo entero entre las economías medianas y grandes”, explica. “Estamos en una situación que da tranquilidad para actuar, sabiendo que las propias proyecciones del Banco también indican una desaceleración importante de la economía para el año entrante, que no conduciría a una recesión pero sí a un crecimiento muy bajo”.

El horizonte, según Villar, es que aumentando la tasa de interés se frenaría un exceso de demanda que impulsa la inflación. Así, “la economía crecería muy poco el año entrante, 0.5%, pero mantendría unos niveles de actividad extraordinariamente altos”. Eso porque mientras el promedio de América Latina fue crecer alrededor del 2% o 2.5%., y en 2023 el 1.5% o máximo 2%, que es mucho menos que el 8% de Colombia en 2022. En últimas, el Banco le apunta a bajar seriamente el alza de precios el próximo año, para, como dice el gerente, “con bajos niveles de inflación, podamos recuperar un nivel de crecimiento saludable en el mediano y en el largo plazo”.

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