Mareas azules en Baleares contra las prospecciónes petrolíferas
Todas las islas se manifiestan para que Industria prohíba las pruebas
En cada una de las islas Baleares retornaron a la calle las mareas azules, expresión de rechazo ciudadano a la autorización de prospecciones sísmicas previas a los sondeos petrolíferos en el mar del archipiélago. Este sábado cientos de personas, en Palma, Mahón, Ibiza y Formentera, acudieron a las convocatorias de las plataformas unitarias creadas desde la sociedad civil. “Nuestro mar no está en venta”, se gritó en Mahón, "Ibiza entera dice no a las petrolíferas" o el "Balears diu no" unánime en todas las citas.
Los portavoces proteccionistas suponen que el Gobierno central puede postergar las resoluciones -posiblemente favorables como en Canarias- a una fecha posterior a los comicios autonómicos y locales, de mayo de 2015, para evitar que la decisión tenga un impacto electoral negativo para el PP. En las marchas y en las recogidas de firmas y alegaciones masivas se quiere evidenciar –de nuevo- el estado de oposición y preocupación existente ante la inminencia de las resoluciones gubernamentales sobre el impacto ambiental. El argumento de la amenaza de posibles vertidos en una comunidad turística es unánime.
El Gobierno central ha de informar el proyecto de prospecciones de la empresa Cairn Energy entre las costas peninsulares y las islas, con especial incidencia en el golfo de Valencia. Esta iniciativa está ante el trámite final. Otra que está en proceso de revisión alude a la zona norte de Menorca y hasta el sur de Ibiza.
El Gobierno de Baleares del PP rechaza esos planes y se muestra al lado de las organizaciones sociales, empresariales y los grupos de oposición, PSOE , Mes e Izquierda Unida. El presidente balear José Ramón Bauzá repite su rechazo a las prospecciones y reprocha a los socialistas que autorizaran los primeros trámites desde la Administración central en la pasada legislatura.
“Por un Mediterráneo libre, nuestro mar no se vende” es otro de los lemas que encabezan las movilizaciones. El Ministerio de Industria remitió ya el expediente sobre la zona del golfo de Valencia al Ministerio de Medio Ambiente, que dispone de un período de tres meses, hasta el 3 de diciembre, para informar la declaración de impacto ambiental.
