Un mágico viaje musical a la sastrería del Teatro Real

El Sastrecillo Valiente abre El Real Junior, un amplio programa de propuestas musicales con las que se pretende estimular y desarrollar la sensibilidad artística de niños y jóvenes. Del 30 de octubre al 1 de noviembre se podrá disfrutar del espectáculo de Títeres Etcétera.

Se levanta el telón y en escena nos encontramos con la recreación de una sastrería como la del Real, verdadera fuente de inspiración de El sastrecillo valiente y muy especialmente la figura del jefe del departamento Ovidio Ceñera: “Una persona que nos ayudó para adentrarnos en este mundo, y que defiende mucho el valor de este oficio y del equipo que dirige", dice Yanisbel Martínez, adjunta a la dirección en la compañía.

Así, en escena nos encontramos con los elementos propios de una sastrería: Patrones, maniquíes, miriñaques, agujas, planchas, tijeras, rollos de tela... Elementos nunca visibles para los ojos del espectador que desde su butaca disfruta de la magia del teatro sin conocer los entresijos de la puesta en escena, aquello que se esconde 'entre cajas'. La compañía Títeres Etcétera se ha marcado un objetivo claro con El Sastrecillo Valiente: “Quisimos, como en otros montajes de la compañía, poner en relieve otros oficios del teatro, que no son siempre los más evidentes o visibles”, añade Martínez.

El musical nació de un encargo del propio Teatro Real en 2012. El coliseo lírico lo había programado ya anteriormente en versión concierto, pero no escénica. Fue una coproducción en la que también participó el Festival Internacional de Música y Danza de Granada y el Abao-Olbe. Cuenta, además, con la colaboración del Parque de las Ciencias de Granada: “En este importante museo andaluz el espectáculo se creó ante la vista de los visitantes, antes de su estreno en diciembre de 2013 en el Real”, argumenta Martínez.

Algo más que un cuento clásico

Narra la historia de un sastrecillo que en su taller mata de un golpe a siete moscas que le importunan. Sorprendido por el número, decide salir a contar su hazaña, para lo que borda un cinturón en el que pone “siete de un golpe”. Llega cerca de un palacio, donde los campesinos y gente de la corte al leer su cinturón, creen que se trata de siete hombres. Por el valor y la fuerza que le suponen, el rey, enterado de su presencia, le encomienda entonces salvar al reino de diferentes peligros: dos gigantes, un jabalí y un unicornio. En recompensa el sastre recibirá la mitad del reino y la mano de la princesa. El valiente sastrecillo consigue vencer los obstáculos gracias a múltiples astucias y trucos, y termina contrayendo nupcias con la hija del monarca. Además, como en otras creaciones de la compañía hay una historia dentro de otra. En este caso la del departamento de sastrería de un teatro, que cuenta su versión del cuento, a la vez que introduce a los niños en el mundo de la sastrería escénica, y enseña términos, instrumentos y acciones habituales de este oficio.

El sastrecillo valiente se compone a partir de un trozo de tela ante la vista del público, la plancha se convierte en un jabalí, los bastidores de bordado en gigantes, y patrones y tijeras conforman un gran unicornio... Todo es posible en este montaje de la compañía granadina, reciente Premio Nacional de Artes Escénicas para la Infancia y la Juventud, que solo precisa de dos actrices, tres titiriteros y ocho músicos para contar este precioso cuento musical. Todo ello con el objetivo de poner en primer término “el valor de la imaginación, de la creatividad, de las ideas, como verdaderos motores para mover el mundo”.

Tibor Harsányi escribió esta partitura para títeres en 1950, haciéndose cargo de la versión de este famoso cuento de los Hermanos Grimm. Nos encontramos ante una suite en la que ocho instrumentistas y un narrador cuentan juntos una historia que enternecerá a los espectadores del Real del 30 de octubre al 1 de noviembre con unas melodías, muy descriptivas, aptas para la comprensión de todos los públicos, que se han sido traducidas al castellano por Felicia Sastre.

“Queremos provocar momentos de verdadera felicidad y reflexión para disfrutar en familia”. Sobre el escenario del Real todo es posible gracias a numerosos trucos, sencillos pero eficaces que transportan a grandes y pequeños a momentos verdaderamente mágicos. En escena, una serie de recursos escénicos que van de los trampantojos a juegos de planos, elementos que aparecen y desaparecen... Un papel esencial para crear la magia es la iluminación a cargo de Lia Alves: “Crea ambientes muy contrastados entre el ámbito de la sastrería y el del cuento, y consigue una iluminación precisa y mágica”, resalta Yanisbel Martínez de este espectáculo especialmente apto para niños a partir de 7 años.

Después del paso de la compañía por el Real, continuarán su gira con los distintos espectáculos que tienen en repertorio con la vista puesta especialmente en la llegada de uno de sus grandes espectáculos, Soñando el Carnaval de los animales a su tierra. Del 8 al 11 de diciembre se podrá disfrutar de este impresionante montaje en el Palacio de Congresos de Granada coincidiendo con el Puente de la Inmaculada.