Jude Law: “Es bueno para un actor cumplir 40”

Llegada cierta edad, pocos tienen ganas de celebrar su cumpleaños. Y menos en Hollywood. La excepción se llama Jude Law. El actor británico nunca se sintió tan relajado como a las puertas de los 40. “Me siento estupendamente, gracias por preguntar. Saludable y feliz, las dos cosas más importantes en esta vida”, reconoció el intérprete a este periódico durante la presentación de su último trabajo, la película de animación El origen de los guardianes. La fecha clave que marcará su llegada a los 40 es el 29 de diciembre y su deseo es “algo sencillo, celebrarlo en familia con una buena comida”. Eso sí advierte, con dos regalos, nada de juntar el de Navidades con el de cumpleaños. “Reconozco que soy un malcriado”, añadió.

Law asegura que está ilusionado con lo que le deparará la década que ahora comienza. “Como actor los 40, los 50, son un momento realmente estupendo. No tanto para una actriz pero en el caso de los hombres te llaman para papeles más complejos, más interesantes. Vale, no me llamarán para los trabajos en los que contraten a uno de 20 pero tengo 40. Es normal”, reflexiona con una pizca de maldad en esos ojos que siguen siendo tan extremadamente azules como le eran hace 20 años, cuando empezó.

“No puedo más que sentir una punzada de pena por lo que les espera a las nuevas generaciones”, dice en referencia a esos que como Robert Pattinson son su relevo. “Tendrán toda la atención que no quieren y dentro de diez años les harán las mismas preguntas que me hacen a mi ahora en referencia a algún chavalillo que en estos momentos no pasa de los 11”, se ríe.

Durante años de Law se supo todo. Su nombre se propagó por doquier, por guapo, por su talento como actor pero también por ser víctima del asedio de los paparazzi. Fue una de las estrellas en el centro del escándalo que llevó al traste publicaciones de la prensa amarilla como News of the World al demostrarse las prácticas poco éticas para inmiscuirse en la vida privada de los famosos. “No sabes lo contento que estoy de dejar esa parte de mi vida a un lado”, respira ahora tranquilo.

La relajación también se refleja en su rostro, oculto tras una frondosa barba que tiene para su próximo papel, Dom Hemingway, que no permite apreciar las facciones afiladas que le dan la perfección a su cara. Además tampoco son ya tan afiladas, con algunos kilos de más en su cuerpo, para el mismo papel, dice, y mostrando esa frente cada vez más despejada que en Japón bautiza ese tipo de calvicie como “un Jude Law shiteru, lo llaman”.

Queda poco del aire huraño, arisco y altivo que ha demostrado durante una carrera tan meteórica como llena de obstáculos y hoyos. Hubo películas como Gattaca le convirtieron en el hombre perfecto y El talento de Mr. Ripley o Inteligencia Artificial le encumbraron a una fama inmediata donde parecía no haber película sin Jude Law. Y también hubo escándalos que se acumularon igual de rápido en su biografía, especialmente los amorosos. Separado de la diseñadora de moda Sadie Frost con quien tuvo tres hijos, durante años mantuvo una relación de ida y vuelta con la actriz Sienna Miller. La pareja decidió en febrero de 2011 que lo mejor era seguir cada uno su propio camino y lo contaron a través de un portavoz. "Puedo confirmar que Jude Law y Sienna Miller ya no mantienen una relación", declaró el representante del protagonista de Sherlock Holmes. Tanto Law como Miller decidieron llevarla a cabo de forma "amistosa y de mutuo acuerdo", por lo que seguirán "siendo amigos". Ella en este tiempo ha sido madre y tiene una pareja estable. Él sigue soltero.

El intérprete de la última versión cinematográfica de Sherlock Holmes no se arrepiente de ninguno de sus pecadillos de estos 40 años porque como dice “para llegar a donde estás uno tiene que pasar por las mismas cosas”.

Puestos a elegir en su carrera, los trabajos que le deparan más orgullo son los que hizo a las órdenes del fallecido Anthony Minghella (El talento de Mr. Ripley y Cold Mountain, por los que fue candidato al Oscar, y Breaking & Entering) pero a la hora de resumir lo aprendido en este tiempo solo tiene un consejo que dar: “No te creas la fama. Disfruta del trabajo, de la experiencia pero no esperes mucho del resultado. Eso no importa tanto. Lo importante es el camino y los amigos con los que trabajas. Esas son algunas de las cosas que he aprendido en estos 40 años".