Heidi Klum pide el divorcio

Parecían una pareja feliz a prueba de líos extramatrimoniales o cualquier otro tsunami emocional que aqueja a muchas ilustres parejas de Hollywood. Pero el cuento de hadas que vivían Heidi Klum y Seal en compañía de sus retoños terminó abruptamente en enero pasado.

El viernes pasado, tres meses después de que anunciaran la separación, la modelo alemana pidió el divorcio del cantante en un tribunal de Los Ángeles (Estados Unidos). En la demanda alega “diferencias irreconciliables”, según informa la revista People en su edición digital. La pareja quiere llegar a un acuerdo para compartir la custodia de sus cuatro hijos.

El cese de la convivencia de Klum y Seal sorprendió a propios y extraños porque hasta ese momento no había trascendido —o por lo menos públicamente— que existieran desavenencias entre ellos. “Hemos disfrutado siete años de matrimonio llenos de amor, lealtad y felicidad, pero tras mucha reflexión hemos decidido separarnos", explicaron entonces en un comunicado.

“Nos hemos profesado el mayor de los respetos el uno hacia el otro a lo largo de la relación y seguimos queriéndonos mucho, pero nos hemos distanciado. Este es un proceso amistoso y proteger el bienestar de nuestros hijos sigue siendo nuestra mayor prioridad, especialmente durante estos tiempos de transición”, añadieron.

Seal y Klum son padres de Henry, de seis años; Johan, de cinco, y Lou, de dos. A ellos se suma Leni, de siete, adoptada por Seal y fruto de la relación anterior de la también presentadora de televisión con el millonario italiano y exdirector de la escudería Renault de fórmula 1 Flavio Briatore.

La modelo alemana, de 38 años, y el cantante británico, de 49, comenzaron su relación en 2003 después de que Klum pusiera fin a su relación sentimental con Briatore. En diciembre de 2004 Seal le pidió matrimonio y se casaron en mayo de 2005 en Careyes (México). Desde entonces tenían por costumbre renovar sus votos matrimoniales todos los años.