_
_
_
_
_

El banco portugués BPI se dispara un 27% en Bolsa por la opa de Caixabank

El cuarto banco portugués está penalizado por su negocio en Angola

Las acciones del banco portugués BPI se dispararon este martes en Bolsa por el anuncio de la opa de CaixaBank el 100% del capital. Los títulos han cerrado la sesión con una subida del 27%, hasta 1,325 euros, muy cerca de los 1,329 euros por título que ofrece la entidad española, que aspira a comprar el 59,1% que no controla. Ese precio supone valorar el banco en 1.936 millones de euros y el 55,9% que CaixaBank no controla, al que se dirige la oferta, en 1.082 millones.

El banco que preside Isidro Fainé condiciona su oferta a superar el 50% del capital (lo que implica una aceptación mínima del 5,9%) y a que lo accionistas eliminen las limitaciones a los derechos de voto. Además, CaixaBank se reserva la posibilidad de retirar su oferta en caso de que un país de la zona euro —léase Grecia— impague su deuda, la reestructure o salga de la moneda única.

Tras una suspensión previa de la cotización, BPI regresó esta mañana a cotizar con el mismo éxito que en las tres jornadas anteriores cuando, sin duda, se recogían los rumores de la OPA. En cuatro días la acción se ha revalorizado un 44,6%. En una hora ya se habían intercambiado 8 millones de títulos, cuando la media diaria es de 2,8 millones. En l sesión cambiaron de manos 26,7 millons de acciones.

Para el inversor no han hecho mella las recientes pérdidas anunciadas sobre el ejercicio de 2014. Más de 161 millones de euros; ni que su mejor negocio, Angola, pase en estos momentos por una fuerte crisis debido a la caída del precio del petróleo. El Gobierno angoleño ha tenido que rectificar su presupuesto anual, calculado sobre la base del precio del petróleo a 81 dólares, para adaptarlo a un precio que ronda los 50. El petróleo supone más del 30% del PIB del país y el 85% de sus exportaciones. Desde hace unas semanas, se han restringido las transferencias de dinero, así como la importación de productos básicos.

Ullrich pretende que BPI acabe por hacerse con Novo Banco y ser el primer banco de Portugal, pero Fainé tiene muchas reticencias sobre esa operación

Pero la crisis económica de Angola no es la única sombra sobre el BPI, cuarto banco portugués. Desde comienzo de año han entrado en vigor nuevas normas de las autoridades bancarias europeas que obligan a una mayor cobertura del riesgo de los bancos europeos en negocios de Angola y de otros países que no se rigen por las mismas reglas que en Europa. Este nuevo régimen castiga especialmente al BPI, pues es el banco portugués con mayor negocio en Angola. El BPI posee el 50,1% del Banco de Fomento de Angola (BFA), mientras que el resto es propiedad de Isabel dos Santos, hija del presidente del país, a través de su sociedad Unitel. De los 127 millones de beneficios que le dio al BPI su negocio internacional, 116 provienen de Angola.

Pese a que la opa es sobre el 100% del BPI, CaixaBank la ha lanzado con la aquiescencia de accionistas minoritarios y, especialmente, de Isabel dos Santos. Si el banco catalán tiene el 44% de BPI, la empresaria angoleña posee el 19%, gracias a que años atrás La Caixa le vendió un 5% de lo que tenía. Durante estos años ha habido un buen entendimiento entre Dos Santos y el presidente de CaixaBank, Isidro Fainé y, probablemente, la necesidad de que BPI reduzca su riesgo en el país africano acabe con acuerdo de conveniencia para que Dos Santos aumente su participación en el banco africano.

Primero BPI ¿después Novo Banco?

La OPA sobre BPI es, para algunos analistas, el paso previo para que el BPI compre Novo Banco -la parte buena del Banco Espírito Santo. Pero este objetivo es más un deseo del actual director general del BPI, Fernando Ullrich, que del presidente de CaixaBank. La compra de Novo Banco convertiría a BPI en el primer de Portugal y cumpliría el sueño de Ullrich -casi una revancha- de hacerse con la expropiedad de los Espírito Santo; sin embargo, Ullrich tienen que vencer las serias reticencias de Fainé.

BPI, al igual que el Banco Popular o el Banco Santander, ha mostrado su interés oficial por la compra de Novo Banco, lo que les da derecho a conocer al detalle su situación económica. Sin embargo, para hacerse con Novo Banco habrá que desembolsar más de 3.000 millones de euros y en un periodo que va a coincidir en el tiempo con el cierre de la operación de CaixaBank sobre BPI, en junio. Además, BPI tendrá que competir con el dinero chino, que ya se ha hecho con el BESI, el banco de inversión del grupo Espírito Santo.

Sinergias por valor de 650 millones

CaixaBank considera la opa una operación de bajo riesgo. Es un banco que conoce bien, con baja morosidad y buenas coberturas. El banco español valora las sinergias (ahorro de costes y aumento de ingresos) a lograr con la compra de BPI en 650 millones, con 100 millones materializados en 2016 y 130 millones anuales desde 2017. El efecto sobre el beneficio por acción recurrente será positivo desde el primer año.

La operación tendrá un impacto sobre el capital principal de CaixaBank (con la aplicación plena de las futuras reglas) de 80 puntos básicos si logra el 51% del capital y de 140 puntos básicos si alcanza el 100%. CaixaBank espera hacerse con el 75% del capital, con lo que el impacto sería de 110 puntos básicos, rebajando su coeficiente al 10,4%. El banco se pone como objetivo volver a superar el 11% y eso no le impide volver al dividendo en metálico. Este martes anunció que el último pago con cargo al ejercicio 2014, a pagar en junio, será en efectivo. Espera seguir combinando efectivo y acciones en 2015, “con aumento de los pagos íntegramente en efectivo en 2016”, explicó.

La agenda de Cinco Días

Las citas económicas más importantes del día, con las claves y el contexto para entender su alcance.
RECÍBELO EN TU CORREO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_