Greenspan lanza un mensaje de optimismo en medio del desplome bursátil
El presidente de la Reserva Federal dice que la economía de Estados Unidos sigue creciendo pese a las caídas en Bolsa y a los efectos de los atentados
La economía de Estados Unidos ha soportado la caída de valores de la bolsa, la retracción de las inversiones y los atentados terroristas, y sigue creciendo. Ese análisis ha sido efectuado hoy por el presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan en una comparecencia ante el el Comité de Bancos del Senado.
Greenspan ha dibujado un panorama optimista de la situación económica de EE UU y ha dicho que la serie de reveses de los últimos meses "hubiera inducido una contracción grave en ciclos económicos anteriores".
Los legisladores recibieron al presidente del banco central de EE UU preocupados por la volatilidad de los mercados de valores, la serie de escándalos por estafas empresariales, el debilitamiento del dólar frente a otras monedas, y un retorno a los déficit fiscales después de cuatro años de superávit.
El republicano Phil Gramm, de Texas, sostuvo que Estados Unidos tiene "una política monetaria que es la envidia del mundo", y que Greenspan es el responsable del banco central "más grande de la historia del mundo".
El demócrata Christopher Dodd, de Connecticut, ha dicho que entre los indicios de recuperación de la actividad económica estadounidense le preocupa "la fuga de capitales, y los capitales que no vienen aquí debido a las dudas crecientes sobre la integridad de nuestro sistema".
El republicano Richard Shelby, de Alabama, también ha dicho estar preocupado por "la condición de nuestros mercados financieros, que demandan cambios serios en las reglas de contabilidad".
Greenspan, quien hoy se ha referido a la caída sustancial de los valores en los mercados financieros, ya había advertido en anteriores ocasiones sobre la inminencia de "ajustes".
En diciembre de 1996, Greenspan ya se había referido a la "exuberancia irracional" de las inversiones financiera.
Pero el funcionario ha sostenido hoy que "la liviandad y brevedad" de la desaceleración económica del año pasado "son testimonio de la mejora notable en la capacidad de recuperación y la flexibilidad de la economía de Estados Unidos".