China pide más explicaciones antes de invertir en el fondo de rescate del euro
El Constitucional exige que la aportación alemana pase por el pleno del Bundestag
China no piensa anunciar en la cumbre del G-20 de Cannes, que se celebrará el 3 y 4 de noviembre, nuevas inversiones al fondo de rescate europeo, según dijo ayer el viceministro de Finanzas. Zhu Guangyao opina que su país "ya hizo bastante" al inyectar fondos en el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera.
"Una inversión china extra necesita más discusiones y llevará tiempo. Pero esperamos que sea rápida", añadió. El ministro dio la bienvenida a los acuerdos de la cumbre europea del miércoles, en la que se aumentó la capacidad del fondo hasta un billón de euros y se aprobó una quita a la deuda griega del 50%. Al día siguiente, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, conversó con su homólogo chino, Hu Jintao, para presentarle los resultados de la cumbre.
El BBVA coloca 750 millones en bonos y reabre el mercado de emisiones
El presidente del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, el alemán Klaus Regling se entrevistó ayer con autoridades chinas. Desde Pekín, adonde ha viajado en busca de inversores, dijo que no espera un pacto inmediato. "China tiene que invertir cada mes debido a su superávit. Y las autoridades han demostrado que están interesadas en oportunidades de inversión atractivas, sólidas y seguras", señaló. China cuenta con la mayor reserva de divisas del mundo, valorada en unos 3,2 billones de dólares (2,3 billones de euros), y en los últimos meses ha invertido una cantidad no desvelada en bonos de países europeos en crisis, como Grecia, Portugal, España o Hungría. Regling, que dijo que Asia contribuye en un 40% al fondo de rescate, declinó confirmar una información del Financial Times según la cual Pekín estaría dispuesto a aportar hasta 100.000 millones de dólares (unos 70.000 millones de euros al cambio actual).
Desde Alemania, una resolución hecha pública ayer supone una traba para avanzar en el fondo de rescate europeo. El Tribunal Constitucional (TC) suspendió temporalmente los planes para que un reducido grupo de parlamentarios asuma decisiones futuras sobre el fondo. El Parlamento alemán tenía previsto que una pequeña Comisión de nueve diputados pudiera aprobar medidas de urgencia. El TC exige ahora que el Gobierno federal acuda siempre al pleno del Bundestag para sancionar cualquier nueva ayuda. Esta suspensión no afectará a las decisiones adoptadas hasta ahora. La coalición que dirige la canciller Angela Merkel lamentó la decisión, ya que ralentizará la reacción de Alemania ante decisiones de urgencia.
No es esta la única mala noticia de ayer sobre la crisis europea. El Tesoro italiano se vio obligado a ofrecer una rentabilidad del 6,06%, la más alta desde la introducción del euro, para colocar 2.980 millones de euros en bonos a 10 años.
Por otra parte, el BBVA ha reabierto el mercado de emisiones para la banca española, cerrado a cal y canto durante cinco meses, con la colocación de una emisión de bonos senior a 18 meses por importe de 750 millones de euros y un precio de 250 puntos básicos sobre midswap. Según informaron fuentes del mercado, la emisión se ha colocado a través de la propia entidad, Citigroup y Goldman Sachs. Asimismo, el precio se ha establecido finalmente en la banda baja de la horquilla inicialmente prevista, de entre 250 y 260 puntos básicos sobre el índice para estas operaciones.
El Santander fue el último banco español en acudir al mercado de bonos, al culminar el pasado 3 de mayo una emisión por 1.000 millones de euros. El BBVA culminó el pasado 11 de mayo otra emisión de bonos senior, aunque en este caso la colocación se hizo en dólares, por 1.600 millones. Esta reapertura del mercado de emisiones se produce después del optimismo extendido tras la cumbre del miércoles y después de que la banca española haya garantizado su capacidad para cumplir con las exigencias de recapitalización.
