La revisión catastral de Mundo Ilusión multiplica por siete el IBI
Marina d'Or tendrá que abonar todos los años cantidades millonarias
Alrededor de 60 propietarios de terrenos integrados en el Programa de Actuación Integrada (PAI) Mundo Ilusión, con una extensión total que supera los 17 millones de metros cuadrados entre las localidades de Oropesa y Cabanes, se reunieron ayer tarde en asamblea en este último municipio para analizar los efectos de la revisión catastral, que declara como urbanas sus parcelas cuando no lo son. Los propietarios mostraron su preocupación y enfado porque hasta ahora pagaban una media de 0,65 euros por cada metro cuadrado de sus fincas rústicas, y ahora, con la conversión en urbanas tras la recalificación del suelo del proyecto, tendrán que abonar un mínimo de 4,64 euros por cada metro urbano.
Propietarios de los terrenos afectados por el PAI no saben cómo podrán pagar
Algunos, considerados grandes potentados sobre el papel con la nueva tasación, lamentaban ayer que tendrían que "quitarse de comer" para poder pagar. Todos exigieron que no suba el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) hasta que se ejecute el desarrollo urbano, previsto para dentro de 20 años, según la empresa promotora, Marina d'Or.
La asamblea fue convocada por Carles Mulet, el portavoz de Units pel Poble en Cabanes, filial de Iniciativa, ante el "silencio y opacidad" del equipo de gobierno local del PP, que dirige el alcalde Francisco Artola. Los propietarios lamentaron que no habían sido informados por el Consistorio del incremento en el impuesto, del plazo de las alegaciones oportunas, ni se había contestado a su requerimiento para que pudieran prepararlas.
Según el cálculo efectuado por uno de los abogados que acompañó a Mulet en la reunión, por los 15 millones de metros cuadrados del PAI que se encuentran en el término municipal de Cabanes, el Ayuntamiento ingresará alrededor de 4.800.000 euros al aplicar el nuevo valor del metro cuadrado y el coeficiente estimado del 0,7 con el que sospechan puede gravar el Ejecutivo local, menos las correspondientes bonificaciones.
Algo más de la mitad de esa factura tendrá que pagarla la empresa Marina d'Or como propietario de más del 50% de los terrenos del futuro aprovechamiento urbanístico en Cabanes, a lo que habrá de sumar el pago por una superficie inferior al millón de metros cuadrados que posee en el término de Oropesa. Según la ley, los promotores están exentos del pago del IBI durante los tres primeros años siempre que hayan comenzado las obras del proyecto, pero fue el propio presidente de la compañía, Jesús Ger, quien anunció que el PAI no se construiría hasta dentro de "20 o 25 años". La empresa ya trabajaba ayer a contrarreloj en la búsqueda de posibles soluciones para evitar pagos millonarios cada año.
A los pequeños propietarios que participaron ayer en la asamblea, con algunas decenas de hectáreas cada uno de media, en su mayoría heredadas de sus ancestros, no les salían las cuentas. Algunos se echaban las manos a la cabeza y otros negaban en silencio al darse cuenta de las cifras "imposibles de asumir" por quienes poseen un pequeño erial o una parcela con algunos almendros o naranjos que apenas dan para soportar los costes de producción.
Preocupación y enfado porque por tasación pueden ser incluidos en los supuestos que contempla el recuperado impuesto del patrimonio, o sus hijos dejar de tener acceso a las becas escolares o universitarias. Considerados "como ricos", algunos "con suerte" llegan "a fin de mes", según afirmó uno de los titulares afectados que prefirió guardar su nombre en el anonimato.
Mundo Ilusión fue ideado por el expresidente de la Diputación de Castellón Carlos Fabra a finales de los noventa. Como respuesta a la alicantina Terra Mítica, prometió que la Generalitat construiría un gran parque temático dedicado "a la magia y al circo", que llevaría aparejado un gran complejo urbanístico con miles de viviendas, hoteles y campos de golf, que sería el "motor del turismo" de la provincia y una infraestructura "básica" para hacer rentable el ya entonces planeado aeropuerto -que sigue sin aviones 176 días después de su inauguración-. Tras un decenio de largas, el Consell enterró el parque temático Mundo Ilusión hace dos años. Hoy casi nadie cree que alguien pueda recuperar la idea. A aquel parque del circo, acabaron creciéndole los enanos.
