¡Todos en contra de San Valentín!
El CCCB organiza una velada alternativa al día de los enamorados
"El amor es un virus y vamos a extirpárnoslo, si alguien ha venido con proposiciones romanticonas que se vaya, ¡Estamos en contra de San Valentín!". Con esta proclama tuvo lugar anoche en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona una velada alternativa al día de los Enamorados. Fue un acto abierto a todo el público en el que solo había dos requisitos para participar: escoger una canción o poema de amor muy malo, y subir al escenario para recitarlo con grandes dosis de imaginación y humor.
La lectura colectiva llegó a congregar a 200 personas, que se sublevaron en contra de las flores, los peluches, los bombones y los envoltorios en forma de corazón. La frase del escritor argentino Rodolfo Fogwill marcó la hoja de ruta: "Se necesitan malos poetas para que estallen las mil formas del poema". Además, en una pared se proyectaron las frases que durante todo el día los internautas habían escrito en Twitter, con el hashtag antisanvalentín.
En el acto se leyeron poemas y reinterpretaron canciones
En la velada participaron escritores como Eloy Fernández Porta, quien realizó una performance en la que despotricó contra la sociedad más conservadora con actitud combativa, enfundado en guantes de cuero y a ritmo de heavy metal. Y Martí Sales, que recitó un poema de Joan Vinyoli haciendo flexiones y dándose golpes contra el pecho con un micrófono y unos guantes para fregar.
A ellos se les unieron un sinfín de espontáneos. Y, aunque pueda resultar contradictorio, el poeta más escogido fue Pablo Neruda. Se recitaron sus versos después de haber pasado por diversos centrifugados, como traductores automáticos en austriaco o reinterpretaciones de sus poemas más emblemáticos: "Me gusta cuando me besas porque estás como pirada...", fue una buena muestra de lo que se dijo. El segundo nombre más recurrido fue el del cantante Raphael y el estribillo de "Como yo te amo" el más vitoreado.
También hubo quien escarbó en la historia del santo: "Era un médico romano que se hizo capellán, casaba militares y, como estaba prohibido lo condenaron a muerte, ¿Y eso es motivo de celebración?", se gritó desde el escenario. Otros, decidieron autoalabarse, "Tengo estudios, vivo sola, soy educada, elegante...", dijo una joven con el micro en la mano.
Sin embargo, a su vez muchas personas confesaron recelos más profundos: "Si me miro al espejo solo veo dolor", desgranó con voz rota otra chica. "No nos engañemos, al final, la gente que despotrica tanto del amor es la que acaba más enamorada", susurró alguien entre críticas contra grandes superficies y marcas de bombones.
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