Afer abrirá en Aragón su fábrica de pisos tras recibir la financiación

La controvertida fábrica de pisos en serie del grupo empresarial Afer estará en funcionamiento en Aragón en seis meses y entregará las primeras viviendas modulares en el verano de 2011. Éstos son los cálculos de la filial Habidite (la empresa creada por Afer para gestionar este novedoso proyecto) tras haber cerrado la financiación con una entidad bancaria el pasado viernes. "El proyecto ya sólo depende de nosotros", señalaron fuentes de la empresa al dar por concluidos todos los trámites.

Más de tres años después de que se presentase este proyecto -traslada el sistema modular que se aplica en el sector del automóvil a la construcción, con los que los procesos constructivos pasan del andamio y las grúas a una planta industrial- y tras frustrarse los previstos en Euskadi (Alonsotegi y Azkoitia), el grupo vizcaíno que dirige Jabyer Fernández afirma que la fábrica no tiene ningún obstáculo. "Tenemos el visado del Colegio de Ingenieros del País Vasco y del de Arquitectos de Zaragoza, el permiso del Organismo de Control Técnico [que hace un seguimiento del proceso constructivo y garantiza la calidad del proyecto], que es la empresa SGS Tecnos, y el de la aseguradora [que ofrece la garantía de 10 años en la construcción], que es Musaat", afirman.

Habidite construirá en Zaragoza 20 pisos modulares del Gobierno aragonés

La filial Habidite ha trabajado durante casi un año en la fábrica prevista en el municipio de Magallón, sito a 56 kilómetros en Zaragoza, tras ver inviable la que iba a ser su primera planta en Alonsotegi.

El pasado año, en estas fechas, se desató el enfrentamiento entre Fernández y el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, por el retraso en el cumplimiento de los tres convenios firmados por ambos en diciembre de 2006. La Diputación no facilitó el suelo al que se había comprometido, lo que no fue aceptado por Fernández y se abrió el litigio: la institución foral anunció la rescisión de los únicos cuatro contratos de obras exclusivos de Afer en Vizcaya (finalmente serían tres los rescindidos), denegó el aplazamiento de una deuda fiscal por el impago de 43 millones de una operación urbanística y el dueño del grupo acusó a Bilbao de querer hundirle.

El asunto está en los tribunales con varias denuncias mutuas, pero Fernández ha mantenido su IDEde poner en marcha su proyecto (no existe en el mundo ninguna fábrica de este tipo de pisos) y se ha centrado en Aragón. Hace unos días ya se oficializó el cambio de domicilio social de Habidite y otras dos sociedades -Habidite Proyects y Habidite Technologies- de Vizcaya a Magallón. Así, sólo quedan en territorio vizcaíno Habidite Alonsotegi y Habidite País Vasco, las que firmaron los convenios con la Diputación.

La fábrica, que se prevé esté en funcionamiento en unos seis meses, será más modesta de lo anunciado en 2003, cuando se hablaba de plantas para producir 3.500 viviendas modulares y 1.100 empleos directos. Tendrá capacidad para construir 1.000 pisos anuales y creará 500 puestos, según los datos de Habidite. Los primeros pisos en serie ascenderán a 20, dentro de un edificio de cinco plantas, y forman parte de un proyecto de 170 viviendas de protección oficial en Zaragoza, adjudicadas en 2009 por el Gobierno de Aragón, en manos socialistas, por concurso.

Para esta promoción, Habidite suscribió el viernes un crédito de 25 millones con Ibercaja. La construcción de esos 20 pisos modulares servirá para poner en marcha la fábrica en Magallón, que ocupará una nave ya construida, y cuyo presupuesto se cifra en 30 millones de euros. En esta planta, según las mismas fuentes, se han invertido hasta ahora 13,5 millones, a los que se unirá la aportación de seis millones de recursos propios y la ayuda del Ministerio de Economía, anunciada en mayo pasado, de 5,1 millones dentro del programa de incentivos regionales. La compañía ha pedido además subvenciones a la Unión Europea.

La intención empresarial es que la denominada primera fase de la planta se amplíe en un futuro, ya que el grupo vizcaíno dispone de 50.000 metros cuadrados de suelo en Magallón para actividad industrial. Estos primeros 20 pisos no forman parte del convenio suscrito en 2008 entre Habidite y el Gobierno aragonés, que, según afirmó el pasado año la compañía de Fernández, incluye el compromiso del Ejecutivo de adquirir 2.000 viviendas en serie que se fabriquen en la planta de Magallón.