La difícil digestión del relevo andaluz
El PSOE de Andalucía da muestras de desfallecimiento en mitad de la legislatura del ascenso de Griñán
Al PSOE andaluz, el principal sostén electoral de los socialistas, le ha entrado una pájara. La digestión del relevo de José Antonio Griñán por Manuel Chaves en la presidencia de la Junta de Andalucía, que abandonó tras 19 años, empieza a notarse ahora en mitad de una legislatura marcada por una extraordinaria crisis económica. La reciente encuesta del prestigioso Instituto de Estudios Sociales Avanzados (IESA) pronostica por primera vez que el PSOE perdería las elecciones, pero sobre todo revela que el cambio en Andalucía no ha calado. Este dato es el que espolea la pretensión de algunos dirigentes socialistas de adelantar la elección de Griñan como líder del partido en un congreso extraordinario.
A los socialistas les preocupa más que no cale el cambio que la ventaja del PP
La crítica interna toca al partido, al grupo parlamentario y a la Junta
Ese cónclave no tiene fecha, pero está convocado desde el mismo segundo en el que el secretario general, Manuel Chaves, y su sucesor en la Junta, José Antonio Griñán, decidieron el 21 de noviembre no esperar al verano de 2012. La pregunta sigue siendo cuándo. Y la respuesta de cada vez más dirigentes hoy es: "Si Griñán quiere, cuanto antes mejor"; "si Griñán lo decide, mejor mañana que pasado". Lo novedoso es que algunos de los que hoy suscriben esa idea eran completamente contrarios hace dos meses -"Una locura", sostenían, "con la crisis económica"-, mientras otros se mantienen en su posición contraria, pero abiertos "a lo que interese al partido.
La opción de un congreso el próximo mes de julio no se ha impuesto, pero se está abriendo paso por muchos motivos. El principal de ellos es que creen necesario consolidar a su nuevo líder y acompasar una orquesta que empieza a desafinar, después de una larguísima etapa de paz interna de 14 años y de resultados electorales muy sólidos. "Chaves sigue siendo secretario general y mientras eso ocurra, todos los días tendremos algún problema", pronostica un destacado dirigente.
La encuesta del IESA, que atribuye una ajustada victoria al PP sobre el PSOE si hoy hubiera elecciones, ha sido como "un choque de realidad", describe una de las personas que han hablado con este periódico. Pero no es ese dato del sondeo el que preocupa, sino la respuesta del 61,7% acerca de que es deseable un cambio de gobierno, de que sólo el 28% sabe a la primera que Griñán es el presidente y que sólo uno de cada cuatro valora el relevo. "El cambio ya se ha producido y resulta que la gente pide un cambio", apunta irónica una fuente. "Es normal que el cambio no haya calado porque la situación económica es muy grave", matiza otra, contraria a un bandazo en estos momentos.
En el PSOE no hay una única opinión de las cosas, se discuten, se defienden y una vez consensuadas se acatan. Pero para algunos "es evidente" que ya menos. La crisis institucional en la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, donde el PSOE ha ordenado a sus representantes suscribir un comunicado de apoyo a las leyes locales que ha elaborado el consejero de Gobernación y vicesecretario general, Luis Pizarro, en contra de la opinión del presidente socialista de esta institución, se ve como un "síntoma" de que la "máquina chirría".
La crítica interna, por ahora en voz baja, toca a todos los ámbitos de decisión: al partido, al grupo parlamentario y al Gobierno. Aunque culpen a la crisis de que los mensajes del Ejecutivo no calen, hay dirigentes que destacan "la bisoñez" del equipo elegido por Griñan, y añaden: "Hay una pérdida de iniciativa política" y "tensiones" entre los miembros del Consejo de Gobierno, y al grupo parlamentario lo despachan con un "ni está ni se le espera".
En este ambiente creciente de susurros, lo que más preocupa con vistas a un congreso son las banderías, el resurgir de grupos, de sectores, de jefes de tribu. Fuentes socialistas niegan que Chaves y Griñán tengan pactada la fecha, pero aseguran que "nunca será antes de la presidencia de la UE" que acaba en junio. "A partir de ahí, la opinión del presidente de la Junta será determinante".
