Foto de la patronal con el Gobierno
Ferrando apuesta por introducir reformas "cuando la cosa esté más tranquila"
El presidente de la patronal valenciana Cierval, Rafael Ferrando, presidió ayer con el delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, la apertura de una jornada sobre las medidas aprobadas por el Ejecutivo para potenciar las exportaciones y la internacionalización de las empresas valencianas en el marco del Plan E. Los encuentros del empresariado con el representante del Gobierno no son raros. Pero sí han sido tradicionalmente mucho más infrecuentes que con el Consell, aunque ahora escaseen.
Ferrando consideró necesario recuperar parte del peso perdido frente a otras autonomías en el conjunto de las exportaciones. El territorio, recordó el presidente de Cierval, llegó a representar el 14% de las ventas españolas al exterior, mientras que en estos momentos supone el 10%. "Hemos ido creciendo en estos años de crecimiento en exportaciones, pero los demás han ido creciendo todavía más, lo que nos ha hecho perder puestos relativos". El objetivo a corto plazo debe ser avanzar un punto, hasta el 11% del total del Estado, porque la recuperación no llegará por el lado del consumo interno, "que tardará mucho más en ponerse en marcha", pronosticó Ferrando, sino por el del sector exterior. La valenciana sigue siendo la tercera comunidad más exportadora. Peralta admitió que España tardará más tiempo en salir de la crisis que otras economías de su entorno, del mismo modo que empezó a sufrir sus efectos más tarde.
El presidente de Cierval volvió a referirse a la necesidad de introducir reformas económicas, pero su planteamiento sonó más moderado del que hace unos meses empleaban la patronal autonómica y española. "Vamos a hacer esfuerzos por parte de todos para tratar de llegar a acuerdos que posibiliten que los trabajadores españoles puedan en un futuro recibir, como han recibido sus padres, las pensiones correspondientes al esfuerzo de toda una vida", dijo, en relación con las previsiones de la UE sobre la insostenibilidad del sistema español de pensiones en el horizonte de 2060. Las reformas deberán hacerse, afirmó, "cuando la cosa esté más tranquila" en materia de "financiación y paro". Peralta recordó que en 1995 se vaticinaba que el sistema de pensiones colapsaría en 2025; "hoy se habla del año 2060, dentro de 50 años".
