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Reportaje:Tercera jornada de Liga

"Me voy disconforme"

Pellegrini admite que el Madrid no le gustó hasta que alineó más medios en la segunda parte

El Madrid saltó al campo con tantos delanteros que Benzema, aunque fue titular, no pudo entrar en el partido. Mandara lo que mandara el entrenador, Manuel Pellegrini, la naturaleza de los jugadores que empleó los empujó a disgregarse. Seis hombres por un lado y cuatro por el otro. El resultado fue que el Madrid se paralizó contra el equipo más pobre de Primera. Durante una hora, el público del Bernabéu, que acudió a ver un festival, contempló algo bien distinto. La estadística de faltas en la primera parte fue reveladora: el Madrid hizo nueve y el Xerez tres. El triple. Síntoma de ausencia de orden y de juego. La hinchada empezó a pitar. Algunos la tomaron con Gago. Tímidamente, los pitos se extendieron a otros con más galones. El Bernabéu se revolvía o enmudecía, mientras los 6.000 seguidores del Xerez concentrados en el fondo norte se desgañitaban emocionados: "¡A por ellos! ¡A por ellos!". Mientras la gente se mostró paciente, Pellegrini observó el espectáculo de brazos cruzados en la zona técnica. Hizo pocas indicaciones. Arriba, en el área de Renan, dos de sus delanteros atacaban siempre el mismo terreno. Raúl siempre reaccionaba antes. Siempre se desmarcaba primero. Siempre dejaba a Benzema descolocado, sin encontrar su lugar. Viéndolos, parecían dos leones disputándose un conejo. Algo de eso debió ver Pellegrini. Diez minutos después del descanso, el entrenador resolvió meter mano al asunto y cambió a Raúl por Granero. Luego metió a Guti y quitó a Kaká. Con la entrada de más volantes, el Madrid se equilibró, jugó mejor, goleó al Xerez, y la gente se calmó en las gradas. De paso, Benzema tuvo ocasión de demostrar su clase.

"En el primer tiempo perdimos muy rápidamente la pelota", lamentó el técnico
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"No hicimos un buen partido desde el punto de vista colectivo", lamentó Pellegrini, tras el encuentro. "En la primera parte perdimos muy rápidamente la pelota. El equipo no alcanzó a asociarse. Nuestras líneas estuvieron muy espaciadas. En el segundo tiempo mejoramos con el ingreso de mediocampistas. Tuvimos más control del juego y concretamos los goles. Pero en general, me voy disconforme con el partido".

El técnico chileno explicó que la alineación que dispuso contra el Xerez forma parte de una estrategia cuyo objetivo es dar descanso a los jugadores que jugarán más minutos contra el Villarreal el próximo miércoles, en El Madrigal. "Cada partido sirve para sacar distintas conclusiones", apuntó. "Hicimos la alineación pensando en los partidos que tendremos por delante. Había que pensar en el Villarreal y en el Tenerife. Son dos partidos en cuatro días. Contra el Xerez estimamos que éste es el mejor equipo para sacar este partido adelante. Sabemos que podemos actuar según dos fórmulas: la directa, aprovechando que tenemos delanteros rápidos que desequilibran mucho; y la otra es con centrocampistas que dan mejor trato al balón".

De las explicaciones que dio, se deduce que ayer Pellegrini hizo una concesión al dibujo táctico que no se repetirá con frecuencia lejos de Chamartín, ni contra adversarios más importantes que el Xerez. Frente al Villarreal, Guti, Higuaín y Granero tendrán más minutos. El técnico del equipo andaluz, Cuco Ziganda, lo vio así: "Hasta el minuto 30 del segundo tiempo hemos estado en el partido. Luego ellos han quitado a uno bueno y han sacado a otro que es igual de bueno, o más".

La mala noticia para el Madrid fue la nueva lesión de Van Nistelrooy, que reapareció en partido oficial. El holandés tiene una posible rotura fibrilar.

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