El Puerto coruñés aprueba la inversión de 2010 sin saber cómo pagar el nuevo muelle
De los 154 millones que gastará, 149 se destinarán a continuar la dársena exterior
Enfrascada en "diagnosticar" en cuánto se disparará el coste de la obra pública en marcha más importante de Galicia, la construcción del puerto exterior de A Coruña, la Autoridad Portuaria consiguió, de momento, el visto bueno del Estado a su plan de empresa para 2010, que incluye una inversión total de 154,6 millones de euros. La mayor parte del dinero disponible para el próximo año (149,54 millones) se lo llevará la nueva dársena en obras desde hace cuatro años en la agreste Punta Langosteira, situada en el municipio de Arteixo. Era la cifra prevista y Puertos de Estado aprobó el martes esa programación anual.
Pero el puerto de A Coruña, en cuyo consejo de administración se sientan el Ayuntamiento y la Xunta, sigue sin saber cómo y sobre todo de dónde obtendrá los 850 millones de euros que, en una primera estimación, costará la nueva dársena. Son unos 250 millones más del presupuesto inicial (600 millones). La Autoridad Portuaria anunció que presentará la próxima semana una informe que cifra con más exactitud cuánto costará el puerto exterior, a cuánto asciende su sobrecoste y cómo financiarlo.
El Ministerio de Fomento mantiene la incógnita sobre la petición unánime de Xunta, Puerto y Ayuntamiento para que se modifique el convenio de 2004 que prohíbe urbanizar algunos de los cuatros muelles liberados del céntrico y viejo puerto antes de que comience a funcionar la nueva dársena. Los responsables del puerto esperaban poder obtener financiación anticipada para las obras al vender los terrenos este mismo año del muelle de Batería, en pleno corazón de A Coruña y destinado, según el convenio firmado con Fomento, a usos terciarios, con la construcción de hoteles, oficinas y otros equipamientos.
La única buena noticia es que, de momento, no hay grandes retrasos en la construcción, iniciada en 2005. Los "pocos meses" de demora, según fuentes del puerto, "se recuperarán si hay un verano con óptimas condiciones marítimas", no como las de los dos últimos años.
