_
_
_
_
_

"No nos ha llegado ni un duro"

Más de 700 familias de Móstoles esperan desde hace cuatro años las subvenciones para arreglar sus casas

Los vecinos de la plaza de Nicaragua, en Móstoles (208.000 habitantes), no guardan un buen recuerdo del 6 de septiembre de 2005. Aquel día, la Comunidad de Madrid declaró su barrio Zona de Rehabilitación Integral. O, lo que es lo mismo, obras para mejorar fachadas, cubiertas, portales, ventanas, cañerías e instalaciones eléctricas de los 18 bloques de la plaza, en la que viven 720 familias. Además, los vecinos recibirían una subvención cercana al 50% para hacer frente a los costes de los trabajos. Algunas de esas obras se hicieron. Otras aún continúan en marcha. Pero las ayudas nunca llegaron.

"El Ministerio de Vivienda y la Comunidad de Madrid llegaron a un acuerdo en 2007 para financiar la mitad del presupuesto total. El Ministerio le pagó su parte a la Comunidad, pero ahí se quedó. A nosotros no nos ha llegado ni un duro", explica, sentado en su salón, Antonio, que vive en el bloque 3.

Desde que se pusieron en marcha las obras, los vecinos han pagado entre 13.000 y 18.000 euros cada uno. La mayoría tuvo que pedir créditos al banco o ampliar sus hipotecas para hacer frente a las cuotas que les pedían las empresas constructoras. Sin embargo, el dinero público que se les prometió sigue sin llegar.

"Para muchos la situación empieza a ser muy complicada, porque hay gente que se ha quedado en el paro o que es pensionista", relata Tino, un portavoz vecinal. Juan Gutiérrez es una de esas personas. Cobra una pensión no contributiva de 346 euros. Vive solo y las obras se han comido todos los ahorros que tenía. "Pondría a más de uno a vivir con la pensión que yo tengo. Y encima que le prometan un dinero que nunca llega", dice, mientras se ajusta los tirantes que le sujetan el pantalón. Ya debe 1.800 euros a la comunidad de vecinos por los trabajos. Y no es el único.

La demora en el pago de la subvención, unida a la crisis económica, ha provocado que muchos vecinos del barrio se vean obligados a dejar de pagar a la comunidad. "Encima se dan situaciones de enfrentamiento entre unos y otros, porque los demás tenemos que hacer frente a lo que algunos no pagan", señala Alejandro, vecino también del bloque 3, que enumera como una ametralladora las "deficiencias" de las obras realizadas. De hecho, en su bloque los trabajos de rehabilitación llevan paralizados varios meses por impago.

Su problema ha llegado al pleno del Ayuntamiento de Móstoles en varias ocasiones. El pasado mes de noviembre el grupo socialista presentó una moción para exigir el pago inmediato de las subvenciones. Fue rechazada. El Gobierno municipal insiste en que desde hace muchos meses ha venido pidiendo a la Comunidad de Madrid que abonase las cantidades adeudadas a los vecinos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El Gobierno regional aprobó a finales del pasado año el pago de estas subvenciones, que ascienden a algo más de 3,5 millones de los siete que cuestan las obras. Pero el dinero sigue sin llegar.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_