La guerra del gas entre Rusia y Ucrania provoca escasez en 16 países europeos
Alemania, Francia e Italia, perjudicadas por el recorte impuesto por Moscú
Los efectos de la guerra que enfrenta a Rusia y Ucrania por el gas se extienden, de forma imparable, por Europa. Al menos 16 países europeos (11 de ellos de la UE), incluidos Alemania, Italia y Francia, ya sufren drásticos recortes en el suministro de combustible o, directamente, no reciben ni un metro cúbico, debido al severo recorte aplicado ayer por Moscú, para castigar a Kiev, en el volumen de gas que bombea a través de territorio ucranio. La UE, que importa de Rusia un tercio del gas que consume, calificó de "inaceptable" esta situación y exigió el restablecimiento inmediato de los envíos de gas desde Rusia.
El grupo alemán Eon advirtió ayer de una escasez inminente del gas que la compañía estatal rusa Gazprom envía a la mayor economía europea a través de su vecino ex soviético. "Hasta nuestra capacidad puede llegar al límite si continúan estas reducciones del suministro y si seguimos con temperaturas bajo cero", afirmó sin concretar cifras de suministro Bernhard Reutersberg, presidente de Eon Ruhrgas, el mayor cliente europeo de Gazprom.
La mayoría tiene reservas para varias semanas; otros, para apenas unos días
Eslovaquia prepara el estado de emergencia y la calefacción ya falla en Bulgaria
Mientras tanto, la llegada de gas ruso a Italia, cuarta economía europea, se redujo al 10% de la cantidad normal, según un portavoz de ENI, informa Miguel Mora. Francia no se libra. La empresa GDF Suez informó de que el suministro de gas ruso cayó un 70%, aunque la tercera economía europea es menos vulnerable que Alemania e Italia, porque sólo compra a Gazprom un 15% del gas que consume, frente al 44% de los alemanes y el 37% de los italianos. España, que compra casi todo el gas a Argelia y Noruega, no tiene ahora contratos con Rusia.
"Estamos en una situación de crisis", afirmó el Gobierno búlgaro. El suministro ruso a los Balcanes, vía Ucrania, se ha paralizado totalmente, mientras que Polonia dice estar recibiendo sólo un 15% y Austria, un 10%. Eslovaquia, que ha visto caer el flujo del gas en el 70%, ha anunciado que decretará el estado de emergencia teniendo en cuenta que el 98% de sus necesidades en gas natural dependen de las importaciones desde Rusia.
Los problemas de suministro que afronta Europa empezaron la semana pasada, cuando Rusia y Ucrania abrieron otra guerra del gas (hubo un enfrentamiento similar en 2006). El 1 de enero Gazprom paralizó el envío de gas que vende a Ucrania por el impago de una deuda millonaria y la falta de acuerdo en el precio del combustible para 2009. El lunes, Moscú denunció a Kiev por el supuesto robo del gas que envía Gazprom a la UE a través de su vecino ex soviético y ordenó recortar también esos envíos para castigar al país. Rusia envía el 80% del gas que vende a la UE a través de Ucrania.
El resultado fue que, según Ucrania, la compañía estatal rusa recortó ayer el suministro hasta 74 millones de metros cúbicos, cuando normalmente bombea 300. Gazprom dijo el lunes pasado que sólo lo recortaría hasta 235 metros cúbicos.
El efecto fue inmediato y los más perjudicados fueron Bulgaria, Grecia, Macedonia, Rumania y Turquía, que se encontraron con el cese completo del suministro. El Gobierno turco confirmó el corte, pero añadió que estaba tratando de compensar esos suministros por otras vías, incluido el gasoducto ruso Blue Stream, que pasa por el fondo del mar Negro.
La mayoría de los países europeos aseguran que tienen suficientes reservas para que, al menos durante un mes, los ciudadanos no sufran las consecuencias de la guerra del gas. Pero hay países cuya situación puede volverse desesperada en cuestión de días. Bulgaria, por ejemplo, ha advertido de que las reservas cubrirán sus necesidades "unos pocos días". Dos ciudades del este de ese país, Varna y Dobrich, ya se han quedado sin suministro de gas natural. En la primera, donde para hoy se prevén temperaturas de dos grados bajo cero, 12.000 casas se están congelando sin calefacción.
El ministro de Industria y Comercio de la República Checa, Martin Riman, confirmaba ayer en Ucrania que la situación había "cambiado dramáticamente" a partir de antenoche y advertía que continuaba "empeorando", especialmente "en la frontera eslovaca". Riman se encontraba ayer en Kiev presidiendo la delegación de la UE que viajó para discutir la crisis.
Al mismo tiempo, el presidente de la compañía ucrania Naftogaz, Oleg Dubina, acusaba a Rusia de haber disminuido a menos de un tercio el gas que transita por Ucrania. Alexandr Shlapak, vicejefe del secretariado de la presidencia ucrania, se quejó ante la delegación comunitaria de que Rusia había "infringido los acuerdos" al reducir bruscamente los suministros en tránsito sin siquiera dar previo aviso.
A pesar de que Bruselas ha declarado que no hará de mediador entre Rusia y Ucrania por considerar que el conflicto que los enfrenta es meramente comercial, Kiev pidió a la delegación comunitaria que los representantes de la UE estén por los menos presentes en las negociaciones de ambos países, que han convocado una reunión clave para mañana.
Alexander Vondra, viceprimer ministro checo para Asuntos Europeos, llamó ayer a Moscú y a Kiev a "resolver esta semana" el conflicto y señaló que el descenso de los suministros a Europa ya había superado el registrado durante la primera guerra del gas, hace tres años. "Estas crisis periódicas no son aceptables en el mundo civilizado", manifestó Vondra, quien advirtió a Rusia de que "cerrar los suministros no es el camino adecuado para resolver la disputa".
El jefe de Gobierno checo, Mirek Topolanek, declaró por su parte que la UE no puede "estar secuestrada por los rusos o por algún país de tránsito" y opinó que Ucrania puede perder "credibilidad" si no llega a un acuerdo con Moscú.
Caída de suministro a través de Ucrania
- Alemania. No cifró ayer la caída del suministro de gas procedente de Rusia, pero dijo que se preparaba para una escasez inminente. Importa de Rusia el 44% del gas.
- Italia. Caída del gas del 90%. Trae de Rusia un 37% del gas.
- Francia. Caída del suministro del 70%. Importa de Rusia un 15% del gas.
- Bulgaria. Sin suministro. Importa de Rusia el 100%.
- Eslovaquia. Caída del 70%. Importa de Rusia el 100%.
- República Checa. Caída del 70%. Importa de Rusia el 79%.
- Macedonia. Sin suministro. Importa de Rusia el 100% del gas que consume.
- Croacia. Sin suministro.
- Bosnia. Sin suministro. Importa el 100% de Rusia.
- Serbia. Sin suministro. Importa el 100% de Rusia.
- Polonia. Caída del 85%. Importa el 70%.
- Rumania. Caída del 75%.
- Hungría. Sin suministro.
- Turquía. Sin suministro.
- Austria. Caída del 90%. Importa un 74% de Rusia.
- Grecia. Sin suministro.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.