"Reclamamos poco, pero con intensidad"

En esta segunda legislatura con Francisco Camps, Vicente Rambla (Castellón, 1963), dispone de un despacho que revela el largo trecho que ha recorrido desde su primera responsabilidad política, como director general de la Consejería de Sanidad en 1995. La nueva sede de la vicepresidencia primera del Consell (el Palau dels Valeriola) refleja el poder de este hombre, que coordina políticamente el Ejecutivo valenciano, ejerce de portavoz, y es uno de los hombres de mayor confianza de Camps.

Pregunta. Desde que revalidaron el gobierno han intensificado la estrategia de confrontación contra Zapatero ¿hasta dónde piensan llegar?

Respuesta. No creo que haya enfrentamiento o confrontación con Zapatero. Por ejemplo, en materia de agua fue el Gobierno de España el que de manera unilateral decidió romper el Plan Hidrológico Nacional (PHN). Y en esta legislatura, cuatro años después, se ha vuelto a dar una vuelta de tuerca en el tema del agua, recuperando parte del PHN, pero no el que afecta a la Comunidad Valenciana. No nos podemos quedar parados. Queremos igual trato. Son muy pocas cosas las que reclamamos al Gobierno central, pero con mucha intensidad, porque creemos que son claves para el desarrollo de esta comunidad.

"El Constitucional nos tendrá que decir qué desarrollo foral podemos hacer"

"El circuito de F-1 es el anticipo de una actuación que pagan promotores"

"Reto a cualquiera a demostrar que la criminalidad no ha aumentado"

"Hemos estado años buscando la solución y ésa es el PHN"

"Hay que apartar del debate político la ley de Dependencia"

"Nadie se cree que el trasvase a Barcelona se va a desmontar"

"Educación para la Ciudadanía es como el nacionalsocialismo de Zapatero"

"El modelo de financiación actual no valoró la inmigración"

P. Ustedes han recrudecido la reivindicación sobre el Ebro desde que se ha autorizado el trasvase de emergencia a Barcelona. Pero en la Comunidad Valenciana no hay problemas de abastecimiento.

R. Tan importante es el agua que necesita Cataluña para beber, como la que necesita Valencia para comer. Creo que es justo reclamar un agua, más barata y más rápida para el campo valenciano. El problema de Cataluña no es un problema puntual. Nadie se cree que ese trasvase se va a desmontar dentro de unos años, porque no obedece a una coyuntura de sequía sino a una situación estructural de escasez de agua. El grifo a Barcelona es para beber, para la industria y para el desarrollo económico. Y tan respetable es ese grifo como el del campo valenciano, que no puede abrirse.

P. Pero si mañana se retomase el trasvase del Ebro, el agua no llegaría hasta el 2012.

R. Si no se hubiese derogado ya estaría llegando agua.

P. Y mientras ¿qué hacemos?

R. Es que esa agua hoy estaría llegando.

P. Ya, pero ¿qué hacemos?

R. Hemos estado durante años buscando la solución y esa solución se encuentra en el PHN. No se ha hecho y reivindicamos que se haga. Alternativas como la desalación son complementarias. Es más cara y tiene un impacto energético enorme. Ahora estamos ahorrando 200 hectómetros cúbicos al año con la transformación del regadío. Tenemos 426 depuradoras y casi el 80% del regadío valenciano es por goteo. Más esfuerzo no se nos puede pedir. Hemos llegado al tope. Cuando vemos que en otros lugares sobra agua pedimos que nos llegue la solidaridad.

P. ¿Pero por qué se oponen a la desaladora de Torrevieja?

R. No tiene sentido contaminar la fauna marina y el ecosistema del entorno de Torrevieja, a pocos metros del parque de Las Salinas. La desaladora necesita un suministro de energía, que, difícilmente, seremos capaces de poder soportar. Además, el coste por metro cúbico de agua será muy superior al del trasvase. Nosotros no planteamos el PHN como una cuestión política, eso lo hizo el Gobierno socialista cuando lo derogó.

P. Otro agravio. Exigen más dinero del Gobierno por el aumento de la población. ¿No se arrepienten de haber dado por definitivo el modelo Zaplana, que aprobó el Gobierno Aznar, sin saber qué consecuencias iba a tener?

R. Yo firmé el modelo. Era un modelo que nació con el consenso de todas las autonomías. Obtuvimos un modelo de financiación muchísimo mejor que el que teníamos, ya que empezaba considerar la población como una referencia y el Estado ponía más dinero para repartir. Han pasado 6 años y las competencias de gasto importantes están en manos de las autonomías, en las que ha crecido la población de manera extraordinaria. ¿Qué gran competencia de gasto tiene el Gobierno de España? Si revisamos los distintos ministerios, salvo la seguridad social, no tiene ningún gran gasto excepto el Ejército. Se hace necesario revisar ese modelo de financiación con la población como referencia.

P. Pero lo dieron por definitivo

R. El modelo se hizo a las puertas de una transformación que no se valoró en toda su extensión: el fenómeno de la inmigración.

P. Otra de sus exigencias es la seguridad. El delegado del Gobierno recordaba que empezaron reclamando 1.500 nuevos agentes, luego 2.000, más tarde 2.200 y ahora 3.000 ¿Se plantan?

R. El delegado del Gobierno podrá ponerle la ironía que quiera pero la realidad es muy dramática. Siempre hemos reivindicado que vinieran más de 2.000 nuevos policías y guardias civiles. Aquí han ido presentando la llegada de gente que venía a formarse, pero que luego se repartía por toda España. La realidad es muy distinta. Los niveles de seguridad se han deteriorado en los últimos años de manera extraordinaria.

P. Los datos no dicen eso.

R. Reto a cualquiera a demostrar que la criminalidad no ha aumentado en los últimos años. No responsabilizamos a nadie de la criminalidad, pero hay que dotar la seguridad que sea necesaria.

P. Cuantifique la necesidad.

R. Esos 2.000 agentes que pedimos no están. Cuando empezamos a decirlo, hace dos años, era una cifra aproximada para garantizar la seguridad. Igual que la población ha ido aumentando, nuestras necesidades también van aumentando. Pero si el Gobierno no lo cree, ya no podemos hablar

P. ¿En esa reivindicación se enmarcan las quejas sobre los atascos en los juzgados?

R. Forma parte de la responsabilidad que tenemos en todas las áreas, pero cuando planteamos una reivindicación, no lo hacemos dentro de ningún plan de acción de enfrentamiento a nadie. Es evidente que son necesarios más recursos humanos.P. ¿Le llegan las quejas de los empresarios por el daño que les genera su confrontación con el Gobierno y otros territorios?

R. Sinceramente, no. En este momento, reivindicaciones importantes son financiación, infraestructuras, agua, seguridad. Poco más. Lo que ocurre es que no hemos visto a Zapatero comprometido con nada de la Comunidad Valenciana.

P. Hay un parón en la construcción ¿Qué medidas está poniendo en marcha el Consell para paliar la situación?

R. Es evidente que no mantenemos el ritmo de crecimiento de los últimos años, aunque las previsiones de 2008 siguen siendo de crecimiento. Desde la Generalitat se han puesto en marcha los planes de competitividad para relanzar los sectores manufactureros tradicionales. En infraestructuras, hoy, tenemos en ejecución o licitadas obras por valor de 5.500 millones de euros y utilizaremos todos los resortes de la ley de estabilidad presupuestaria [que prevé el endeudamiento] para garantizar la inversión pública. Si somos capaces de seguir con nuestra política de reducción de impuestos, estaremos aportando nuestro granito de arena al mantenimiento de la actividad económica, pero es necesario que haya una ayuda importante por parte del Gobierno de España.

P. ¿Cómo ajustarán la disminución de ingresos en el presupuesto a causa del parón inmobiliario? ¿Con más deuda?

R. Dentro de la ley de estabilidad presupuestaria se acudirá a todas las opciones que hay.

P. La ley de Dependencia se está aplicando muy lentamente. ¿Están intentando articular algún tipo de solución?

R. No sé si se podrá cumplir en los plazos y con la celeridad que todos desearíamos, pero lo que es evidente es que se ha dado un paso que no tiene vuelta atrás. En este momento de cada 100 euros que gastamos en dependencia, 95 son de la Generalitat y 5 del Gobierno. Es necesario un compromiso serio del Gobierno con las comunidades autónomas y apartar del debate político algo tan serio como la calidad de vida de las personas que tienen la necesidad de depender de otros.

P. El presidente de la Generalitat está en contra de impartir Educación para la Ciudadanía. El informe Pisa cuestiona el nivel de los estudiantes. ¿Decir que vamos a impartir la asignatura en inglés no es poner palos en las ruedas para que fracase?

R. Educación para la ciudadanía, tal y como está planteada, no deja libertad a los padres. Esto es como en los tiempos del nacionalcatolicismo, pero llevado al nacionalsocialismo del señor Zapatero. Mientras la mayor parte de las asignaturas tienen un alto nivel de objetividad, llámese matemáticas, literatura, o inglés, esta tiene un fuerte componente ideológico. Si es obligatorio, porque una ley nos lo impone y no tenemos capacidad para poder hacer otra cosa, pues aprovechemos el viaje y vayamos incorporando el inglés.

P. Habla de una asignatura que se imparte en un buen número de países europeos.

R. No sé el currículo que se imparte en esos países europeos. Yo conozco a los responsables políticos de aquí. Y creo que es una manera de ir incorporando ideología y valores a nuestros niños a través de esa asignatura. Creo que eso no es lo que corresponde.

P. El Tribunal Constitucional ha paralizado la aplicación de la ley valenciana de Régimen Económico Matrimonial, la primera que recupera el antiguo derecho foral ¿Ha habido precipitación?

R. Creo que en el ejercicio de nuestras competencias tenemos capacidad para legislar aquello para lo que nuestro Estatuto y nuestra Constitución nos dan margen. Por tanto, no entiendo por qué si hemos cumplido con ese marco constitucional y estatuario; ejercitamos nuestro autogobierno, y esas instituciones también existen en otros sitios aparece ahora el Gobierno y nos priva del ejercicio de ese autogobierno. Nosotros estamos tranquilamente aquí, implicados en el desarrollo económico y social de esta tierra, y vienen a buscarnos las costillas.

P. Si pierden el pleito ¿se replantearán la recuperación del derecho foral?

R. La sentencia del Tribunal Constitucional habrá que acatarla y las consecuencias que de ella emanen también, pero nos tendrá que explicar el Tribunal Constitucional qué desarrollo estatutario en el ejercicio de nuestro autogobierno en materia de derecho foral podemos hacer.

P. ¿La cláusula Camps sigue siendo válida?

R. La cláusula Camps es una cláusula de cierre para garantizar que esta comunidad no queda detrás de otras autonomías que hayan aprobado en sus Estatutos alguna mejora sustancial. Es una cláusula que tiene todo su vigor y validez, lo que ocurre es que en este momento no se ha considerado oportuno ponerla en marcha, todavía.

P. Se dijo que la Fórmula 1 iba a tener coste cero para la Generalitat y ya llevamos gastados más de 80 millones. Todavía desconocemos cuánto costó la visita del Papa, ¿informarán del coste de la F-1?

R. El coste que tiene para la Generalitat y para los ciudadanos la Fórmula 1 se mide en función de creación de empleo, riqueza, expectativas de negocio, proyección internacional de la Comunidad y de desarrollo económico. Eso es indiscutible. En el mundo habría infinidad de lugares que pagarían lo indecible por tener la oportunidad.

P. Pocos rebaten lo que dice.

R. Bien, pero esa es la primera cuestión por la que se hace. Dicho eso, la F-1 no es un compromiso directo de la Generalitat, sino de la empresa Valmor, concesionaria de los derechos. Lo que está haciendo la Generalitat ahora son las obras del circuito como parte del desarrollo del PAI del Grau. Por tanto, esas obras no son achacables como coste a la Generalitat, sino que eso es el anticipo de una actuación que van a desarrollar y financiar los promotores del PAI. El coste de la organización propiamente dicha, gradas, seguridad, comunicaciones, se financiará con las entradas, publicidad, y otros elementos. El circuito de Valencia es la niña mimada de [Bernie] Ecclestone en la F-1.

P. ¿Entrará la piqueta en el Teatro Romano de Sagunto?

R. Pues va a depender de un grupo de expertos que decidirán cómo y de qué manera acatamos la sentencia. Espero que tomemos la decisión más sensata y no nos volvamos a equivocar como cuando se hizo la transformación.

P. ¿Ve a Camps saltando a la politica estatal como Zaplana?

R. El futuro del PP pasa por Rajoy. Para Camps, en este momento, su máxima ilusión es ser el presidente de la Comunidad Valenciana.