Tren carísimo
El AVE es caro, se mire por donde se mire. Con los actuales trenes, sin AVE, las estaciones de Alicante y Valencia y la estación de Atocha están a tres horas y media. Y a poco más de 60 euros un trayecto de ida y vuelta. Mientras que a esa misma estación de Atocha le separan más de 100 euros viajando desde Málaga o Sevilla.
Lo que clama al cielo es que las provincias de Alicante y Murcia tengan todavía una vía única. Que los políticos hayan consentido que vaya a llegar a ellas antes el AVE que el desdoblamiento de la vía. Lo que clama al cielo es que los Euromeds, Talgos, Alvias, tengan que parar en Monforte, Agost o Novelda para permitir el cruce de los trenes que vienen en el otro sentido. Todavía en 2008.
Por otro lado, con el nuevo sistema de ventas los usuarios de Renfe hemos perdido mucho. En la nueva web no se pueden realizar reservas; antes sí. La tarifa estrella que anuncia descuentos de hasta un 60 % es pura entelequia. En los trayectos con fuerte demanda no se han molestado en sacar ni una sola plaza en los próximos 60 días. Y el descuento sólo vale para la ida, por lo que si en la actualidad en el viaje de ida y vuelta se aplica el 40%, comprobaremos que ese 60% que ahora se publicita sólo vende humo.
