La deuda de Urbanismo en Jerez se multiplica por 385 en sólo seis años

La deuda de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) de Jerez (Cádiz) se ha multiplicado por 385 en los últimos seis años. En 2001, este organismo autónomo del Ayuntamiento adeudaba 200.000 euros y en 2007 la cifra se ha elevado hasta los 77 millones. El gobierno municipal, del PSOE, responsabiliza del agujero económico al líder del PSA, Pedro Pacheco, gestor de la GMU desde 2003 hasta su destitución el pasado mes de marzo. El nuevo gobierno de Jerez ha decidido pedir un crédito para liquidar las facturas impagadas por el ex edil.

La deuda de 77 millones de euros de la GMU obedece a débitos a empresas municipales, operaciones de crédito, subvenciones sin justificar, deudas no presupuestadas y, sobre todo, el impago millonario a proveedores. De hecho, un total de 342 acreedores exigen el cobro de 62,9 millones de euros. La situación se ha hecho insostenible para estos empresarios y decenas de ellos ya han advertido al nuevo gobierno local de que irán a los tribunales si no empiezan a cobrar.

Ante este panorama, el delegado de Urbanismo, Juan Pedro Crisol (PSOE), ha decidido poner en marcha una operación crediticia que le permita poder afrontar la deuda. La falta de liquidez bancaria y la precaria situación económica de la GMU limitan el crédito concedido a 28 millones de euros.

Según explica Crisol, con este montante se pretende pagar, en el primer semestre de 2008, "el 100% de la deuda pendiente con 294 pequeños acreedores que esperan cobrar hasta 100.000 euros cada uno". Al resto de las empresas, con facturas pendientes de hasta más de 1,5 millones de euros, se les liquidará una importante cantidad de una sola vez para después establecer planes de pago a medio plazo y liquidar así el resto de impagos.

"Lo que ha hecho este hombre (en referencia a Pacheco) es un desmán, un desastre administrativo y de gestión sin paliativos. En los últimos cinco años ha contribuido a arruinar la ciudad". De esta forma explica Crisol el desaguisado que ha encontrado en la GMU.

"No nos podíamos imaginar todo lo que nos ha dejado. Hay 7,6 millones en facturas sin reconocer, que no están presupuestadas, y obras impagadas desde que se acometieron hace seis años", lamentó.

Hasta el momento, el nuevo gobierno de la ciudad ha decidido reducir el número de altos cargos de la GMU de 48 a 27. Con esta medida, el coste en retribuciones de la estructura directiva se rebaja de 4,6 millones de euros anuales a 2,2 millones.

Habrá más recortes. De hecho, un documento municipal recoge medidas "inmediatas" que ordenan, entre otras cosas, la congelación de las contrataciones, la reducción de los contratos temporales que no sean necesarios, la eliminación de las horas extra, y la rebaja de salarios de directivos.

Además, el gobierno ya ha propuesto a los sindicatos la congelación de los salarios de los altos cargos desde enero de 2008.