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Reportaje:

... o música en directo

La casa particular de tres aficionados se convierte en una sala de conciertos gracias a una iniciativa que se repetirá cada semana

Ya no es necesario salir de casa un sábado por la noche para disfrutar de música en directo. El salón de estar de un piso normal de tres solteros mileuristas, en el barrio de Argüelles, detrás del cuartel general del aire y a pocos metros del parque del Oeste fue ayer el lugar donde actuaron Aroah, Clovis y Band a Part. Es lo alternativo de lo alternativo. A falta de clubes en la ciudad, bien sirve la casa de unos aficionados.

Anoche se consolidó en Madrid una idea de la organización Live in the Living (en directo en el cuarto de estar), que quiere repetir la experiencia todas las semanas en otras tantas casas cuyos inquilinos no les importe por una noche compartir sus cuatro paredes con medio centenar de desconocidos.

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Alex, Iñaki y David ejercieron de anfitriones de esta segunda experiencia que se vive en Madrid tras una de prueba del pasado mayo. Alex e Iñaki son administrativos, David profesor. A los tres, a parte de compartir piso, les une una pasión loca por la música. "En la oficina es difícil hablar de lo que nos gusta escuchar porque no están en nuestra onda", dice uno de los dos funcionarios, "Asi que organizar un concierto en casa nos permite estar con más gente de gustos parecidos". Ninguno de los tres conocía a la mayoría del público de anoche, pero desde el principio se palpó cierta complicidad: "No creemos que haya problemas con tanta gente porque son muy respetuosos. Y con los vecinos no podemos decir si habrá problemas hasta mañana".

El cuarto de estar de su casa cambió de fisionomía. El mueble de la tele y los sofás, corridos a la pared; y una veintena de sillas plegables puestas por la organización, ocuparon su lugar. Cervezas, refrescos, patatas fritas, aceitunas, panchitos y cortezas de cerdo en mitad del estrecho pasillo a modo de bar.

Acomodado el público en los pocos menos de 50 metros cuadrados de salón, el concierto empezó con el pop ingenuo y afrancesado de Band a Part un dúo no profesional formado por Javi, y su novia Coral. Como no hay amplificación eléctrica ni micros se exige el mejor comportamiento del público, pues cualquier murmullo impediría escuchar las voces de los artistas. Ese público correcto y respetuoso, había pagado anoche 10 euros para asistir a ese concierto tan especial previa solicitud en la página web de la organización (www.livein theliving.es) Con lo recaudado se paga simbólicamente a los músicos y el pequeño bar que montan los de la casa. Entre los asistentes tampoco se conocían mucho. El ambiente íntimo y reducido del lugar propició crear nuevas amistades en poco tiempo. "Pues yo quiero hacer otro en mi casa" "Yo ya estuve en el anterior" "En Edimburgo llevan haciendo esto desde hace muchos años", eran frases que podían escucharse entre esas amistades ocasionales de una noche, parejas y grupos de jóvenes entorno a la treintena.

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En las entanterías de la casa de Alex, Iñaki y David proliferaban los artistas del pop español. Entre ellos uno de Los Enemigos. Curiosa coincidencia, el segundo grupo que actuó fue Clovis, el dúo que lidera Fino Oyonarte, miembro decisivo de Los Enemigos hasta su disolución. "has metido al enemigo en casa" se oyó decir a uno de los amigos de los anfitriones cuando el dúo iba a empezar su actuación.

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