El estilista virtual

Devolver la moda al mundo real. Ésa es la batalla en la que están embarcadas las numerosas páginas web que rastrean las calles de Nueva York, Londres o París en busca de gente llamativamente vestida. Una de ellas, www.thesartorialist.com, se ha convertido en un fenómeno de tal magnitud que su creador, Scott Schuman, ha traspasado la frontera del ciberespacio para publicar sus instantáneas, casuales pero exquisitas, en revistas como GQ o Elle.

Stylemob.com va un paso más allá. Ya no se trata de fotografiar, de observar a gente interesante por la calle, sino de que esas personas se retraten a sí mismas con sus mejores galas y las sometan al juicio de los visitantes. Cada imagen se acompaña de una descripción de las prendas y de claves para comprender la intención estilística del autor (que, a veces, resulta francamente indescifrable). La página permite hacer búsquedas de ideas para vestir en, por ejemplo, una primera cita o un día en la oficina. Además, uno puede crear su propio grupo de asesores, formado por otros miembros de la comunidad, a los que recurrir cuando se le presente una emergencia estética, una duda acuciante y trascendental del tipo: ¿me corto el pelo?, ¿con qué combinan estos zapatos? o el ya tradicional ¿qué me pongo?

La comunidad nació en abril, pero se había mantenido como un foro restringido al que sólo se podía acceder con invitación hasta el 2 de agosto. "Queríamos establecer un núcleo de gente con mucho estilo antes de abrirlo al público para que pudiera servir de inspiración para otros", explica desde San Francisco Sasha Cagen. Cagen, de 33 años, es, junto a Adam Souzis, la creadora de un proyecto que aspira a ser "adictivo" y al que, como miembros activos, se han apuntado ya 7.500 personas. Las que sólo miran son muchas más: desde la apertura el 2 de agosto se han registrado más de dos millones de visitantes. "Todo parte de un impulso muy natural: ver a gente bien vestida y querer saber dónde ha comprado la ropa". Por el momento, el grueso de la comunidad lo forman veinteañeras estadounidenses, pero el objetivo es que "el grupo sea lo más diverso posible".

Para sus creadores, stylemob.com representa la intersección de dos tendencias fundamentales: el auge de los blogs que inmortalizan el estilo de la calle y las redes sociales de la web 2.0. Una ocurrencia que no es la primera comunidad atípica creada por Cagen: ha formado también una red de románticos y orgullosos solteros a cuya filosofía vital ha dedicado un libro (www.quirkyalone.com). Adam Souzis, de 38 años, se ocupa de la parte técnica, y tampoco es ajeno al fervor emprendedor: años atrás fundó Kinecta, una empresa de distribución de contenidos on-line que acabó vendiendo a Oracle.

De momento, la pareja no obtiene beneficio económico alguno, pero aspira a hacerlo. "Esto puede llegar a ser muy grande", asegura Cagen. "Por ejemplo, puede ser un punto de partida para la compra por Internet que sigue siendo una experiencia bastante confusa y atemorizante. Pero si ves a alguien con un vestido genial y un link que te permite saber dónde comprar todas las prendas o incluso dónde peinarte, la cosa cambia. Estamos contactando con esas empresas para que se anuncien, pero lo más importante de todo es potenciar el efecto liberado que Internet puede tener para la moda. Cualquiera puede ser modelo o estilista, ser creativo con su ropa y enseñárselo a los demás".