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Reportaje:EN POCAS PALABRAS

"¿El Neng? No, Eduardo Soto"

El actor de 'Buenafuente' rueda junto a Pepe Viyuela 'Mortadelo y Filemón'

Elena G. Sevillano

"Hoy quiero confesaaar... que estoy muy destrozado", le aúlla casi al oído Edu Soto a un compañero de rodaje. Risas. "Como siempre con Edu", confirma el director, Miguel Bardem. Es el último día de trabajo de Mortadelo y Filemón. Misión: salvar la Tierra. Soto (Barcelona, 1978) ha pasado los últimos días saltando de arnés en arnés ante un enorme croma verde para grabar las tomas coreográficas; de ahí el cansancio. Lleva puesta la ropa de Mortadelo y la cabeza rapada al cero. Esta vez, de verdad, no como con el Neng, el personaje de Buenafuente, para el que usaba una calva postiza. Para la entrevista se pone serio, aunque no ayuda que Pepe Viyuela entre y salga pegado al móvil vestido de Filemón...

Pregunta. El Notario, Miguel Chiclé, El Neng... Parecía predestinado para el papel, por lo de disfrazarse continuamente.

Respuesta. No es una noticia que sorprenda, ¿verdad? Pero Mortadelo se disfraza por otro motivo, relacionado con el escaqueo.

P. El físico ayuda y es larguirucho como Mortadelo. ¿Da mucho trabajo a los de caracterización?

R. Creo que no hay que buscar a un actor que reúna los requisitos del personaje, sino adaptar sus facultades para aplicarlas al personaje.

P. ¿Tiene algo en común con él?

R. Mortadelo es muy infantil. Si hay peligro, tira por la tangente y se pone a reír. Todo el peso dramático cae en Filemón. Mortadelo disfruta del paisaje y de los acontecimientos. Hay veces que yo también reacciono como un niño: me divierto mirando una hormiga antes que preocuparme de movidas.

P. Ibáñez estuvo en el rodaje. ¿Qué le pareció?

R. Yo creo que disfrutó. Estuvo encantador, es súper dicharachero. Al llegar, me dijo: "Hola, hijo mío". Para él yo era su hijo, vestido así. Me pareció mágico.

P. ¿De pequeño leía a Mortadelo y Filemón?

R. Yo sobre todo me quedaba con los dibujos. Reconozco que no leía nada. Era un vago de la hostia.

P. ¿Le siguen saludando por la calle con un "Qué pasa, Neng?".

R. Incluso para mi nuevo programa, El rey de la comedia [que empieza en otoño en TVE], hay medios que ponen: "El Neng ahora presenta". No me molesta, pero confunde a la gente.

P. Parece que no puede quitarse al personaje.

R. No, saldrá, porque no tiene sentido que dentro de 10 años sigan así. Lo adoro, me ha dado gloria, pero tiene que ser un recuerdo. A la gente se lo perdonas, pero que un medio no me presente así: "El Neng hace esto". No, tío: "Eduardo Soto, el que hizo tal".

P. No se le ve muy molesto.

R. No, pero el fenómeno es un poco exagerado. Se le da una magnitud... La gente se ríe, ya está. Y cuando se te viene todo esto encima, pues yo me fijo en la hormiga que pasa y me río, y ya está.

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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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