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Reportaje:

Soluciones para la pesca

Arom Bait elabora cebos con productos naturales frente a los vivos o artificiales

Pescar para cebo constituye una de las primeras necesidades de la flota pesquera para desarrollar su actividad. Esa exigencia se puede acabar en el futuro con el desarrollo de cebos biodegradables obtenidos en función de productos naturales -para sustituir a los cebos vivos o artificiales- que acaba de poner en el mercado con carácter experimental una pequeña empresa, Arom Bait.

El sistema evita la pesca de peces para cebos en un momento en que hay graves problemas de recursos en la mayor parte de los caladeros

Las necesidades de cebo de la pesca industrial se cifran en unos 60 millones de kilos que se deben cubrir con la pesca previa, lo que supone una inversión inicial muy importante en tiempo y dinero. Ramón Tomás era un comercial dedicado toda su vida a la venta de aditivos para la industria agroalimentaria que finalmente se ubicó en una pequeña localidad en la Ribera del Duero, Zazuar. En colaboración con otros miembros de la familia, Sergio Juarros y Xenia Tomás, comenzó a desarrollar los primeros trabajos en un laboratorio artesanal para lograr un producto que sirviera como cebo biodegradable y natural, tanto para la pesca industrial como para la deportiva en mar o en agua dulces.

En la actualidad, tras llevar a cabo las primeras pruebas en algunas flotas industriales con cofradías de pescadores que operan en bajura y con organizaciones de armadores de pesca de altura y gran altura, la empresa prepara su crecimiento con la construcción de nuevas instalaciones en Salas de los Infantes para iniciar su producción a mayor escala.

Para la fabricación de los cebos naturales biodegradables, Arom Bait utiliza una serie de materias primas, como harinas de pescado, aceites o extractos de pescado con los correspondientes certificados de calidad, a los que se añade un conservante. Todo ello se mezcla y se cuece para proceder a su manipulación en frío de acuerdo con su comercialización, tanto en forma de embutido como en planchas.

En principio, los cebos elaborados hasta el momento se pretenden destinar para las pesquerías de palangre y para las nasas. El objetivo de la empresa es desarrollar una política de investigación, lograr los censos más adecuados para cada tipo de pesquería industrial, siempre desde el planteamiento de un producto biodegradable y natural.

Desde una perspectiva ecológica, el nuevo sistema evita la pesca de peces para cebos en un momento en que hay graves problemas de sostenibilidad en la mayor parte de caladeros. Se trata, además, de una actividad que supone reciclar una buena parte de los derivados del pescado y de las conserveras. Las materias primas utilizadas por la firma proceden en su totalidad de empresas gallegas. Finalmente, se trata de un producto cuyos residuos no se degradan ni son contaminantes.

Desde la perspectiva económica, en la mayor parte del año, se trata de un cebo con un coste inferior al producto capturado. Por otra parte, supone una mayor comodidad para las flotas al disponer siempre en el barco o en tierra del cebo necesario para desarrollar su actividad ocupando menos espacio en los barcos y con una mayor limpieza. A diferencia de los cebos vivos, se trata de un producto que no necesita congelación, ni una conservación especial.

Sergio Juarros Nebreda y Xenia Tomás Puerto, propietarios de Aram Bair.
Sergio Juarros Nebreda y Xenia Tomás Puerto, propietarios de Aram Bair.

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