Lucie Aubrac, símbolo de audacia y libertad
Perteneció de forma destacada a la Resistencia contra los nazis en la Francia ocupada
Lyon, 15 de marzo de 1943. La policía detiene a una veintena de personas, entre ellas a un tal François Vallet que deja creer que se dedica al mercado negro. Las pesquisas policiales no progresan pero la curiosidad de la Gestapo sí. La esposa de Vallet es Lucie Aubrac y comprende que, si quiere evitar que su marido -en realidad se llama Raymond Samuel pero se hace decir Aubrac para ocultar su origen judío- acabe en manos de los alemanes y la Resistencia descabezada, tiene que actuar. No lo duda. Se presenta ante el juez como "la representante del general De Gaulle, que es el jefe de Vallet. Si usted, mañana, en el Palacio de Justicia, no firma la orden poniéndole en libertad, no verá la puesta de sol". Y el juez firmó.
Lucie Aubrac había nacido en la Borgoña, en 1912. Era profesora de historia desde mediados de los años treinta y militante comunista. Da clases en Estrasburgo y es allí donde conoce a Raymond Samuel, un ingeniero que se ha formado en Estados Unidos. Cuando los alemanes comienzan la invasión de Francia, los dos se saben en peligro: ella por comunista, él por judío. Les ofrecen la posibilidad de huir a Estados Unidos pero la rechazan. Por patriotismo. Porque quieren resistir. Raymond es hecho preso en una primera oportunidad en 1940, en Sarrebourg, pero ella aprovecha la confusión del frente para liberarle por primera vez. Instalados en Lyon, ella, durante el día, da clases en un instituto y por la noche organiza la liberación de gente detenida por el petainismo.
En enero de 1943 es expulsada del cuerpo docente por gaullista y con su compañero y con Jean Moulin, el líder de la Resistencia en la Francia ocupada, organizan sabotajes, atentados y publican diarios clandestinos. En junio de 1943, Raymond y Moulin fueron detenidos por Klaus Barbie. El segundo murió bajo la tortura pero Raymond y otros 13 resistentes fueron liberados, a punta de metralleta, por un comando dirigido por Lucie.
Francia se queda demasiado pequeña para ocultarla a ella, a Raymond y a su hijo, Jean-Pierre. La Resistencia logra enviarles a los tres a Londres. Justo a tiempo porque, cuatro días más tarde, nace Catherine, segundo retoño de la pareja.
Tras la liberación, Lucie será miembro de la Asamblea Consultiva previa a las primeras elecciones y Raymond será nombrado prefecto de Marsella. Ella vuelve muy pronto a dar clases de historia. Acude a todos los institutos que reclaman su presencia para que testifique sobre lo que fue la ocupación nazi y lo que significó el verbo "resistir", que ella decía que había que conjugar siempre en presente.
De esos años de guerra ha dejado testimonio escrito en Ils partiront dans l'ivresse (Seuil, 1984), que luego ha sido convertido en filme por Claude Berri. En la pantalla, Lucie es Carole Bouquet y Raymond tiene la nariz de Daniel Auteuil. Antes, en 1969, Jean-Pierre Melvilla dirigió L'armée des ombres, protagonizada por Simone Signoret.
Para la socialista Ségolène Royal, Lucie Aubrac "encarnó la lucha de los franceses por la libertad y dentro de ese combate simbolizó la participación de las mujeres". Según el conservador Nicolas Sarkozy, "hay que rendir homenaje a quien rechazó someterse al odio y al antisemitismo y asumió todos los riesgos en nombre de la valentía y el amor".
Lucie Aubrac llevaba dos meses internada en un hospital cercano a París. Tenía 94 años y hasta hace muy poco seguía participando activamente en la vida política. El año pasado, cuando los jóvenes salieron a la calle para protestar contra un nuevo tipo de contrato-basura, Lucie Aubrac les respaldó denunciando a "un Gobierno que profundiza cada día más en la fractura social". Ahora, todas las voces coinciden para pedir que sea enterrada en el panteón y repose junto a Jean Moulin.
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