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Una 'huelga' de grúas amenaza con dejar sin máquinas las grandes obras hoy y mañana

Las 450 grúas móviles autopropulsadas que trabajan en la capital -para las grandes obras civiles pero también para particulares y empresas- permanecerán paradas todo el día de hoy y también mañana, según anunció ayer la Asociación de Empresarios de Alquiler de Grúas, que agrupa a 25 firmas.

Eso podría paralizar algunas de las obras en marcha, sobre todo las del Ayuntamiento de Madrid, aunque un portavoz municipal aseguró: "El paro afectará a las obras, pero no las bloqueará, porque no todos los trabajos se hacen con grúas y porque dos días de paro, a estas alturas, no son tan graves". Sí tendrán que estar mano sobre mano, por ejemplo, los trabajadores que desde hace un mes desmontan la tuneladora Tizona en el túnel sur de la M-30: las grúas que cargan las piezas de acero en los camiones participan en la huelga.

En realidad no es exactamente una huelga, porque en esta protesta "están de acuerdo trabajadores y empresarios", según el secretario general de la asociación, Juan Carlos Mejías. "No es un problema de conflicto laboral. El objetivo es llamar la atención del Ayuntamiento, al que llevamos exigiendo un cambio de reglamento desde los tiempos del anterior alcalde [José María Álvarez del Manzano]. Queremos que el gobierno municipal se dé cuenta de que, si se paran las grúas, se paran las grandes obras de Madrid. Sólo en la M-30 trabajan 100 grúas. Y también hay en el metro, aunque ya menos, y en las obras del Ministerio de Fomento. Si el Ayuntamiento no atiende a razones, a finales de año estamos dispuestos a parar definitivamente", advierte.

Agilizar los trámites

El reglamento que la asociación quiere cambiar establece, según Mejía, que cada vez que una grúa móvil tiene que entrar en Madrid para atender un trabajo ha de pedir una licencia "que tarda un mes en llegar", y circular por la ciudad "escoltada por la policía". "Ese reglamento es de cuando en Madrid había disponibles 20 grúas, no 400. Si nos llaman para poner un aparato de aire acondicionado en un edificio, o un ascensor, no puede ser que tardemos tres semanas por un problema burocrático. Entendemos que las grandes grúas requieran ese cuidado a la hora de moverse por la ciudad, pero no todas", prosigue Mejía.

Un portavoz municipal afirmó ayer que las negociaciones "avanzan" y que el Ayuntamiento confía en llegar "pronto" a un acuerdo con los dueños de las grúas.

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