Un espectáculo ecuestre evoca en Barcelona el 'jaleo' menorquín
Las fiestas de la Mercè acogieron ayer por la mañana en la plaza de la Catedral una muestra de las tradiciones de la isla de Menorca. Uno de los actos que congregó a un público más numeroso fue un espectáculo ecuestre en el que participaron siete caballos negros de raza menorquina, cuyos jinetes los hacían encabritar y caracolear como es habitual en el popular jaleo de las fiestas patronales de la isla por San Juan.
Antes de llegar a la plaza, los caballos desfilaron por La Rambla, la plaza de Catalunya y el Portal de l'Àngel guiados por seis miembros de la Unidad Montada de la Guardia Urbana de Barcelona. Los ciudadanos que les acompañaban en el recorrido no dejaban de fotografiar a los équidos y a sus hábiles jinetes, pero se mantenían casi siempre a una distancia prudencial y no les animaban a saltar como hacen los jóvenes menorquines en las fiestas de San Juan, que se celebran cada verano en Ciutadella. Allí, el gentío se agolpa alborotado en torno a los animales y los más atrevidos jalean a los caballos cada vez que se levantan sobre sus cuartos traseros.
Las fiestas de la Mercè también se han abierto este año al mundo latinoamericano, con Medellín (Colombia) como ciudad invitada de honor. Además, el parque del Fórum ha acogido la celebración del Festival Latino BCN. Las actuaciones musicales han marcado el desarrollo del festival, que ha contado con la participación de los Latin Kings, la banda juvenil convertida desde hace unas semanas en asociación cultural. También se ha dado a conocer la cultura de los países suramericanos y la labor de las entidades instaladas en Cataluña.
