Matices
Cuando hablas de los medios de transporte en Almería y dices que aquí estamos aislados, la gente no se hace una idea clara de lo que quieres decir, y piensa simplemente que estamos aislados. Pero no es que estemos aislados. Es que estamos aislados. Claro que no es lo mismo estar aislados cuando en Madrid gobierna el PP que estar aislados cuando el Ministerio de Fomento está en manos del PSOE. En el primer caso resulta difícil y carísimo salir de aquí, y en el segundo caso también. Y cuando digo carísimo, digo carísimo. Hoy lunes ir y volver a Madrid me hubiera costado 365 euros con 44 céntimos. A Barcelona, 419 euros con sus correspondientes 44 céntimos.
Con estos precios se entiende que el tema de la semana pasada haya sido la intención de Spanair de ofrecer tres vuelos diarios a partir del mes que viene. Iberia, que ahora mismo opera en el aeropuerto de Almería como un monopolio de facto, sin competencia de ninguna clase, se habría visto obligada a bajar los precios. Pero Spanair no quería arriesgarse del todo y pedía algún tipo de acuerdo para implantarse. Por ejemplo, recibir algo de dinero a cambio de promocionar en los aviones la costa virgen de Almería o los miles de adosados que se van a ir construyendo en ella próximamente. Pero la Junta ha dicho que no, que no da dinero a cambio de publicidad ni a cambio de nada, porque eso es una subvención encubierta y las subvenciones a las líneas aéreas regulares están prohibidas por la Unión Europea. Lo ha dicho el delegado de Gobernación, así que debe de ser de verdad. Yo todo lo que dice Juan Callejón me lo creo. El caso es que la pérdida de esta posibilidad ha sido una gran desilusión para todos, y la prensa local ha sacado editoriales conmovedores del tipo "nadie nos quiere".
Ya sé que el precio de los aviones no depende de Magdalena Álvarez. Me ha venido a la cabeza el ejemplo de los aviones, porque a Chaves le ha dado ahora por decir que "los aeropuertos es bueno que sean competencia de la Administración autonómica". Claro que es bueno. Bueno para el presidente de la Junta de Andalucía que en tal caso tendría un poquito más de poder, pero no sé si bueno para los ciudadanos. Me imagino unos aeropuertos dependientes de la Junta de Andalucía, y tiemblo porque podrían alcanzar el mismo nivel de calidad que tienen los equipamientos y las infraestructuras de nuestros colegios públicos.
Pero quien habla de aviones habla de trenes. Seguimos tardando seis, siete horas en llegar a Madrid, aunque tampoco sea lo mismo tardar seis, siete horas en llegar a Madrid con el PP que tardar seis, siete horas en llegar a Madrid con el PSOE. Recuerdo las voces airadas de los socialistas locales cuando el PP eliminó nuestro expreso de medianoche, aquel tren nocturno que tomábamos los que no podíamos o no queríamos pagar el desorbitado precio del avión.
Ahora quienes dan voces son los populares, porque el Ministerio de Fomento socialista va a suprimir el talgo que nos lleva a Barcelona. Pero como muy bien ha explicado el diputado del PSOE Carmelo López una cosa es quitar un tren y otra muy diferente quitar un tren.
