La defensa menos goleada hace agua en los dos últimos partidos
La defensa ha pasado de ser una de las principales virtudes del equipo de Rijkaard a provocar un constante dolor de cabeza al entrenador holandés. En el Bernabéu, el Barcelona encajó cuatro goles por primera vez en los 31 partidos que ha disputado en la Liga. El dato es preocupante porque se produce sólo una semana después de que encajara otros tres tantos, ante el Betis en el Camp Nou.
En el encuentro ante el Betis no pudo jugar Puyol, lesionado. Ayer, quien no pudo actuar en el lateral de la zaga fue Sylvinho, que arrastraba unas molestias. Su puesto lo ocupó Van Bronckhorst, que había perdido su condición de titular en los últimos partidos. Pero ni ante el Betis ni ante el Madrid funcionó una zaga que, hasta la 28ª jornada del campeonato, tan sólo había encajado 18 goles. Dos jornadas después la cifra asciende a 25 tantos. Continúa siendo el Barcelona el equipo menos goleado, precisamente con dos tantos menos que el Madrid y que el Villarreal. La situación es tanto o más preocupante por cuanto que la próxima jornada, ante el Getafe en el Camp Nou, Puyol volverá a ser baja por acumulación de amonestaciones después de haber visto ayer una tarjeta amarilla.
El equipo azulgrana también encajó cuatro goles en la Liga de Campeones, precisamente en el partido que a la postre significó su eliminación de la competición europea. Fue el partido de vuelta ante el Chelsea y el resultado fue el mismo que ayer en Madrid: 4-2.
"Hemos tenido un descuido en dos jugadas, una a balón parado y otra en una acción por la banda", explicó Márquez al referirse a los dos primeros obtenidos por el Madrid. "No hemos tenido la suerte de otros partidos porque después hemos controlado, hemos tenido ocasiones pero hemos perdonado". Puyol, que dijo sentirse bien del tobillo lastimado que le hizo ser duda hasta el momento, admitió: "Es un palo pero espero que esta derrota no nos afecte. El equipo ha respondido muchas veces y creo que volverá a hacerlo".
