Unas memorias para el desquite
La hija lesbiana del vicepresidente republicano Dick Cheney publicará próximamente sus memorias. Son los inconvenientes de ser un político conservador y tener una hija abiertamente homosexual. La aparente irreconciabilidad de ambas cosas quedó clara durante las pasadas elecciones estadounidenses, cuando el aspirante demócrata John Kerry utilizó en un debate presidencial a Mary Cheney como blanco político. Uno de los caballos de batalla electorales de la campaña republicana fue el rechazo absoluto a los matrimonios gays, que los demócratas defendían parcialmente, un tema que obviamente ponía en una situación delicada tanto a Cheney como a su hija, asesora de su campaña política. Su implicación profesional en las elecciones la alejó de cualquier debate público relacionado con el tema o con su vida personal, pero Mary quiere desquitarse, y con su padre nuevamente sentado en el sillón vicepresidencial, sus palabras ya no son una amenaza y ahora podrá hablar abiertamente de sus opciones sexuales y políticas. "Todos los Cheney son estupendos escritores y ella no es una excepción", ha declarado su editora, Mary Matalin, presidenta de la nueva rama de la editorial Simon and Schuster, que inaugurará con Mary su sección de libros de autores conservadores.-
