"Si a alguien le suenan las subvenciones es a Iberia"

Álvaro Middelmann, director general de Air Berlin para España y Portugal está satisfecho con la decisión de la Comisión Europea de definir el marco de ayudas permitidas en los aeropuertos regionales. Eso clarifica el sector del transporte aéreo en el que las compañías de bajo coste se han convertido en protagonistas. Acusadas de romper las reglas de la justa competencia vía subvenciones, Middelmann pide más transparencia, pero aprovecha también para recordar el pasado de Iberia, la escasa agilidad del ente que gestiona los aeropuertos, AENA, y los diferentes modelos de bajo coste que ofrece el mercado.

Pregunta. ¿Cuál es el modelo de Air Berlin?

Respuesta. Nos definimos más que como una compañía de bajo coste, como una compañía de bajo precio, aunque para ello sea imprescindible, claro, tener unos costes muy ajustados. Lo que nos diferencia es que tenemos una política muy agresiva de precios, pero al tiempo nuestras tarifas son todo incluido: menú a bordo, periódicos... También que al contrario de otras low cost utilizamos todos los canales de distribución: Internet, el teléfono y las agencias.

"Al sector, en general, la discusión entre Iberia y Spanair y sus aliados por el reparto de Barajas no le viene bien"

P. También tienen una base de distribución de tráfico (hub) en Palma de Mallorca desde el que distribuyen gran parte del tráfico de la península y Canarias a Europa

R. Sí, también eso nos caracteriza. Hemos sido por tercer año consecutivo el primer operador de ese aeropuerto, aunque, si hay suficiente tráfico, también hacemos vuelos directos desde algunas otras ciudades españolas como Madrid o Barcelona.

P. Air Berlin es ya la segunda compañía aérea alemana. Transporta 12 millones de pasajeros al año, opera directamente 45 aviones e ingresa 1.051 millones de euros. ¿Cuáles son sus próximos planes?

R. En España analizamos alguna ciudad más, pero no queremos extendernos a muchos otros aeropuertos porque el mapa está ya muy cubierto. Cuando abran las nuevas instalaciones de Madrid y Barcelona, allí ampliaremos las frecuencias.

P. ¿Dónde les gustaría ubicarse en el nuevo Barajas?

R. Ahora estamos en la terminal 2 y nos parece muy digna. Yo creo que al sector, en general, esa discusión entre Spanair e Iberia y sus alianzas no nos viene bien.

P. ¿Considera lógica la asignación casi en exclusiva de las nuevas instalaciones a Iberia y sus aliados?

R. Lo que no me gusta es que la asignación, antes y ahora, se haga a dedo. Pero no tengo información suficiente para opinar en profundidad. Creo que en el transfondo hay mucha política.

P. Bruselas acaba de decidir los límites a las ayudas en los aeropuertos.

R. Y sean bienvenidas, porque hay mucho oscurantismo.

P. Iberia cree que las compañías de bajo coste tienen ayudas públicas que no respetan la competencia

R. Creo que su presidente ha perdido una ocasión para callarse, porque si a alguien le suenan las subvenciones en este país es a Iberia, que salió del abismo porque pagamos entre todos los españoles.

P. ¿Qué le preocupa más, el dominio de Iberia en algunas rutas, la gestión de los aeropuertos o la competencia de modelos más próximos de compañías como easyJet?

R. La mezcla de las tres cosas.