"Las exportaciones paralelas no nos satisfacen"

"Pfizer ha lanzado un órdago muy peligroso que pone en riesgo el modelo y sector español de la distribución de medicamentos", señala Olegario Díez, que preside desde hace décadas Cofares, el mayor distribuidor de medicamentos en España. Cree que el proyecto de la multinacional de contratar su propia logística puede provocar desabastecimiento en algunas zonas y afectar a la salud pública por lo que reclama una intervención mediadora de la Administración.

Pregunta. ¿Qué es Cofares?

Respuesta. Una cooperativa farmacéutica de ámbito nacional, que se fundó en 1.944 y que hoy es líder en España en la distribución de medicamentos, parafarmacia y servicios de farmacia, con una cuota de mercado del 18,2% y con 12.500 farmacias clientes, el 62,2% de las que hay en España, de las que 8.000 son además cooperativistas. Es una entidad sin ánimo de lucro, adscrita a la Ley de Cooperativas de 1999 y destinada al servicio del farmacéutico.

"El 80% de la distribución de medicamentos en España está en manos de cooperativas y de sociedades anónimas de capital farmacéutico"

"Exportamos potabilizadoras, descontaminantes nucleares, hospitales de campaña y unidades móviles, entre otros productos y patentes"

"Cofares tiene una cuota de mercado del 18,2%, facturó en 2004 unos 2.000 millones de euros y alcanzó un superávit de 3 millones de euros"

P. ¿Son una excepción?

R. En España, no. Aquí más del 80% del mercado de distribución de medicinas está en manos de cooperativas y sociedades anónimas creadas por farmacéuticos.

P. ¿Qué cuota pagan sus socios y qué ventajas tienen?

R. Todos los socios reciben el mismo servicio, sea una farmacia del centro de Madrid o una de una aldea de Toledo, y pagan la misma cuota. Todos tienen el mismo capital invertido, unos 15.000 euros. No hay reparto de beneficios, o mejor dicho si lo hay aunque no en efectivo. Cofares aplica el superávit a inversiones y a ofrecer condiciones más ventajosas en precio y servicios a sus asociados.

P. ¿Cuál es su facturación?

R. Vamos a cerrar 2004, aún no están auditadas las cuentas, con una cifra de negocios próxima a los 2.000 millones de euros.

P. ¿Beneficios?

R. El superávit, después de todas las inversiones y amortizaciones realizadas, va a ser importante. Unos 3 millones de euros.

P. ¿Cómo ven desde su actividad la política de precios y de margen para los medicamentos de marca y para los genéricos?

R. En los genéricos se acaban de cambiar los márgenes. Tenían un margen más alto, del 33%, pero una disposición del Ministerio de Sanidad lo asimila al de toda la especialidad farmacéutica que es del 27,9%. Es decir, ya no hay diferencias. Y si me pregunta respecto a los márgenes que se les aplican a través de la cooperativa a las farmacias, también se ha reducido del 9,6% al 8,6% este año y hay una previsión de nuevas reducciones para 2006.

P. ¿No les parece bien?

R. Nos crea dificultades. El Gobierno de Zapatero ha incidido además con estas medidas sobre otras que había adoptado hace poco tiempo el Gobierno de Aznar. Son medidas que a mi juicio dañan a la farmacia y, lo que es peor, a las que en algunos aspectos no saca ningún partido la Administración. Ha hecho una rebaja generalizada que no beneficia a ninguno de los sectores que intervenimos en el ciclo del medicamento.

P. ¿Qué suponen los genéricos en su facturación?

R. En torno al 8%.

P. Pero ustedes no se limitan a vender medicamentos.

R. Sí, hacemos muchas otras cosas. Por ejemplo ahora estamos enviando plantas potabilizadoras a países afectados por el maremoto, a través de nuestra fundación, pero lo que quiero decirle con ello es que tenemos una filial, Hospital Hispania, que es quien adquiere y comercializa en exclusiva estas plantas y otros productos y patentes. Estamos negociando con Israel, por ejemplo, la venta de descontaminantes nucleares y hospitalarios; hemos vendido a Gabón un hospital de campaña; unidades móviles hospitalarias a Benin; camiones refrigerados a Libia; y material hospitalario a varios países. Tenemos la exclusiva para España de la cápsula endoscópica; y contamos con marcas propias como Aposán (algodón, termómetros...) y Farline (productos para higiene corporal). También hacemos consultoría logística para varios países...

P. Volvamos a la distribución de sus ingresos.

R. Las exportaciones, unos 36 millones de euros al año, son una parte muy pequeña. La parafarmacia representa el 15% de la facturación y algo menos del 80% el medicamento propiamente dicho.

P. ¿Con qué medios logísticos cuentan?

R. Tenemos 30 almacenes distribuidos por España, 1.700 empleados, 700.000 líneas de producción propia y 36.000 referencias en catálogo, que nos permiten abastecer el 100% de los productos que vende una farmacia. Cofares participa además, junto a otros seis socios de capital farmacéutico, en Organización Farmacéutica S.A. (OFSA). Un operador de servicios integrales de este sector que cuenta con un centro neurálgico y una plataforma logística de 60.000 metros cuadrados, 30.000 construidos, en Marchamalo (Guadalajara), en el que ha invertido 60 millones de euros, y que tiene también subplataformas de distribución en Tenerife, Las Palmas, Barcelona y Valencia.

P. Su modelo de negocio está hoy, sin embargo, amenazado por el gigante farmacéutico norteamericano Pfizer que quiere prescindir de sus servicios en España y contratar su propia logística.

R. Es un tema muy grave que estamos tratando de solucionar. Pfizer quiere tomar las riendas de su distribución porque se siente perjudicada por la exportación paralela de sus productos desde los países del Sur de Europa, dónde su precio de venta es más barato, a los del Norte dónde son más caros. Práctica que daña su estructura de producción y sus cuentas.

P. ¿Y ustedes que piensan?

R. Las exportaciones paralelas tampoco le satisfacen a Cofares. Aunque están amparadas en una legislación racional promulgada en la Comunidad Europea, creemos que si están dañando hoy a la gran industria farmacéutica, que afronta enormes inversiones en investigación, sin aportar nada positivo a la cadena del medicamento.Un pequeño paquete exportador, acordado previamente y que no interfiera en el desarrollo del mercado interior europeo, es legítimo, legal y lógico, pero cuando estas cantidades se disparan crean problemas como el aducido por Pfizer.

P. ¿Qué van a hacer ustedes?

R. Cofares y otros grupos estamos preparando un proyecto de trazabilidad del medicamento para presentárselo a Pfizer. La idea es que todos los cupos de sus medicinas que ponga a la venta en España vayan a través de nuestra distribución a las oficinas de farmacia, y en resumidas cuentas al paciente que las necesite, sin que una parte de las mismas pueda ser desviada a terceros países.

P. Pero Pfizer sigue adelante con su proyecto.

R. Ha lanzado un órdago muy peligroso. Ha dicho voy a prescindir de la distribución tradicional en todos los países del Sur de Europa, empezando por España, y a seleccionar su propio operador logístico desde Nueva York. Cree que con ello puede terminar con la exportación paralela y abaratar los costes, pero su iniciativa es muy perniciosa porque convierte a la farmacia en un mero transmisor de sus productos, porque no es lo mismo transportar bobinas u otra mercadería que transportar medicinas y porque va a tener serias dificultades en hacer llegar varias veces al día los productos que le soliciten a todas y cada una de las 26.000 farmacias españolas. Hay riesgo de que no lleguen esas medicinas a algunas zonas del territorio nacional y de un deterioro de un servicio ligado a la salud de la población.